ESCÁNDALO FINANCIERO

La CNMV rebajó una sanción 'muy grave' a Gescartera por un simple 'cambio de actitud'

La colaboración de Camacho permitió no publicar la multa y facilitó la entrada de la ONCE

La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) tomó el año pasado una decisión crítica: rebajar una propuesta inicial de sanción 'muy grave' a Gescartera y dejarla simplemente en 'grave', lo que en última instancia permitió no hacer pública la multa, facilitó la entrada de la ONCE y con ello el ascenso de la sociedad de Antonio Camacho a agencia de valores. Y el argumento básico para ello, según consta en un informe del organismo regulador al que ha tenido acceso este periódico, fue un simple 'cambio de actitud' de Antonio Camacho a partir de julio de 1999.

La propuesta de los inspe...

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La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) tomó el año pasado una decisión crítica: rebajar una propuesta inicial de sanción 'muy grave' a Gescartera y dejarla simplemente en 'grave', lo que en última instancia permitió no hacer pública la multa, facilitó la entrada de la ONCE y con ello el ascenso de la sociedad de Antonio Camacho a agencia de valores. Y el argumento básico para ello, según consta en un informe del organismo regulador al que ha tenido acceso este periódico, fue un simple 'cambio de actitud' de Antonio Camacho a partir de julio de 1999.

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La propuesta de los inspectores María Teresa de Miguel y Lucrecia Mosquera afirma lo siguiente: 'La infracción muy grave consistente en obstruir la actuación inspectora de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) no puede entenderse cometida o consumada como consecuencia del cambio de actitud experimentado por la entidad y por sus responsables'. Tras este razonamiento, los inspectores proponen que esta falta se califique como 'grave', lo que permitió al consejo de la CNMV celebrado el 13 de julio del año pasado no hacer pública la sanción. La ley obliga a publicar las sanciones 'muy graves', pero permite no hacerlo en las 'graves'.

Sin embargo, antes de llegar a esta conclusión, el informe, con fecha de 11 de mayo de 2000, da por probados todos los hechos por los que se le abrió expediente a Gescartera el 6 de abril de 1999 por presunta falta muy grave: 'Los hechos constitutivos de los cargos imputados en el presente procedimiento y que se relacionan en el capítulo de Hechos Probados de esta propuesta de resolución han quedado debidamente acreditados', se razona en un apartado anterior, en una incongruencia más de las que salpican este caso.

El cambio de actitud de Antonio Camacho tiene fecha: el 15 de julio de 1999, cuando David Vives, entonces director general de Supervisión, pide ser relevado del caso tras los múltiples obstáculos que encuentra para seguir adelante con la investigación, según ha declarado en el Congreso durante la comisión de investigación. El nuevo equipo ad hoc que asume la inspección está dirigido por Antonio Botella, quien ayer compareció en el Congreso como director general de Supervisión de la CNMV.

En varias reuniones semanales en la CNMV, David Vives advirtió a Botella y a los nuevos responsables del caso Gescartera de sus dudas sobre este 'cambio de actitud' de Camacho, pese a lo cual éste dio por buenos, pocos meses después (en noviembre de 1999), documentos bancarios falsos de La Caixa que taparon un agujero de 4.000 millones de pesetas. Vives también advirtió de que cambiar la fecha sobre la que se estaban centrando las investigaciones (30 de noviembre de 1998), era 'un error grave' que permitiría a Gescartera escapar y que equivalía a poner a cero todas las actuaciones de su departamento.

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Curiosamente, esta advertencia toma cuerpo en el informe final sobre las sanciones a Gescartera. En dos ocasiones, este texto confirma que 'a fecha de 30 de noviembre de 1998', el punto en que centró Vives sus investigaciones, Gescartera viene a 'carecer de la contabilidad y registros legales exigidos o llevarlos con vicios o irregularidades esenciales que impiden conocer su situación financiera y patrimonial, conducta tipificada como muy grave'.

Nueva fecha de corte

Sin embargo, con la nueva fecha de corte, en la jerga de la CNMV, decidida por Antonio Botella en contra de las recomendaciones de David Vives, Gescartera sí puede acreditar lo que se le exige (aunque con documentos falsos), lo que de nuevo conlleva una rebaja de la sanción de 'muy grave' a una de 'grave'.

Aún así, el consejo de la CNMV podía haber dado publicidad a la sanción, pues la ley permite hacerlo en el caso de las sanciones de carácter 'grave'. Sin embargo, no se hizo, debido a la oposición de tres consejeros (Pilar Valiente, el vicepresidente Luis Ramallo, y José María Roldán), los mismos que se opusieron a intervenir Gescartera en 1999, según el testimonio que dieron ante la comisión de investigación del Congreso el ex presidente del organismo Juan Fernández-Armesto y el propio David Vives.

La fecha de este informe final es el 11 de mayo de 2000, y su resolución definitiva se produjo en el consejo del 13 de julio de ese año, en el que se le impuso a la agencia Gescartera y a sus responsables una sanción total de 10 millones de pesetas. Además, se decidió no hacer pública la sanción y se autorizó su ascenso a agencia de valores, bajo ciertas condiciones que debía cumplir la ONCE y que finalmente nunca se cumplieron.

Antonio Botella, durante su comparecencia en el Congreso de los Diputados.GORKA LEJARCEGI

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