La peste porcina vuelve a Lleida días después de eliminar los controles

El sindicato Unió de Pagesos considera que esta explotación, de cerdos de engorde, estaba a unos 500 metros de una de las granjas de la misma población afectadas por la enfermedad, por lo que los animales tendrían que haberse sacrificado, al estar a menos de un kilómetro de una granja afectada. Ramon Armengol, de UP, ha criticado la 'tacañería' de la Generalitat por no haber sacrificado en su día los cerdos de la explotación de Penelles, sospechosa ahora de tener la peste, y aseguró: 'El departamento está perjudicando al sector porque no se dio dinero para sacrificar a estos animales'. Armengo...

El sindicato Unió de Pagesos considera que esta explotación, de cerdos de engorde, estaba a unos 500 metros de una de las granjas de la misma población afectadas por la enfermedad, por lo que los animales tendrían que haberse sacrificado, al estar a menos de un kilómetro de una granja afectada. Ramon Armengol, de UP, ha criticado la 'tacañería' de la Generalitat por no haber sacrificado en su día los cerdos de la explotación de Penelles, sospechosa ahora de tener la peste, y aseguró: 'El departamento está perjudicando al sector porque no se dio dinero para sacrificar a estos animales'. Armengol ha añadido que si se confirma el brote, 'será como un jarro de agua fría, cuando todo el mundo daba por terminada la enfermedad'.

Por su parte, Josep Puigpelat, del mismo sindicato, ha añadido que si se declara este brote, 'las administraciones tendrán que establecer mecanismos de intervención pública con la compra de los animales inmovilizados ya que la situación será insostenible para los ganaderos'.

Desde Joves Agricultors i Ramaders de Catalunya, Sergi Vives considera: 'Esto demuestra lo que decíamos de que no se podía cantar victoria hasta el final y de que no se bajara la guardia'.

Este posible nuevo caso de peste se produce cuando en los últimos días se habían ido eliminando las medidas restrictivas en el movimento de cerdos. Así, la semana pasada se levantó la prohibición de movimiento de animales en las dos últimas zonas de protección que quedaban, en Arbeca (Garrigues) y Sant Guim de Freixenet (Segarra). Además, el lunes de esta misma semana se aprobó la posibilidad de que entren lechones en las granjas de la Noguera y Urgell, mientras que una semana antes se permitió lo mismo en Segrià.

Hasta la fecha, sin contar los animales sacrificados preventivamente en Penelles, de los que no se ha facilitado ningún dato, los 15 focos oficiales declarados en Cataluña han obligado a sacrificar 54.000 cerdos. En los últimos días, los sindicatos han reclamado la posibilidad de exportar cerdos a mataderos fuera de Cataluña.