Zapatero condiciona el pacto autonómico a que las comunidades del PSOE recuperen su dinero

'Tendrá que haber dotación presupuestaria suficiente para que las comunidades de Extremadura y Castilla-La Mancha puedan asumir con solvencia la competencia de Sanidad', dijo Zapatero. Hecha esa advertencia, hizo un alegato a favor de los pactos de Estado con el Gobierno: 'No quiero devolverles los años de crispación que ellos provocaron contra nosotros, quiero dar un baño de dignidad a la política, quiero que en política haya adversarios y no enemigos a batir, quiero que el cambio que proponemos también llegue hasta la derecha para ver si también les enseñamos en estos tres años que les queda...

'Tendrá que haber dotación presupuestaria suficiente para que las comunidades de Extremadura y Castilla-La Mancha puedan asumir con solvencia la competencia de Sanidad', dijo Zapatero. Hecha esa advertencia, hizo un alegato a favor de los pactos de Estado con el Gobierno: 'No quiero devolverles los años de crispación que ellos provocaron contra nosotros, quiero dar un baño de dignidad a la política, quiero que en política haya adversarios y no enemigos a batir, quiero que el cambio que proponemos también llegue hasta la derecha para ver si también les enseñamos en estos tres años que les quedan en el Gobierno a hacer oposición'.

Pero en el acto de ayer, ante casi 2.000 personas, el líder del PSOE invocó sobre todo 'el interés de la mayoría de los ciudadanos' como argumento fundamental para pactar con el Gobierno. 'El interés de la gente está por delante de cualquier otra cosa y firmaré acuerdos con quien sea si benefician a la mayoría, y luego que se apunte el tanto quien quiera'. Pero donde no habrá pacto es en la Ley de Universidades. Y el Gobierno, dijo Zapatero, se la tendrá que guardar en el cajón. El líder socialista felicitó a los rectores por criticar el proyecto del Ejecutivo.

En este mitin de Badajoz, tercero de Zapatero en su campaña de explicación sobre 'la oposición útil', hubo mucha expectación ante la posibilidad de que Rodríguez Ibarra y él dijeran cosas diferentes sobre la financiación autonómica.

El primero en hablar de la materia fue el presidente extremeño, que lanzó una advertencia a la ejecutiva federal del PSOE. Y aunque ahí quedó el aviso, luego apostilló que seguro que no habría problemas. 'José Luis, te piden que me impidas hablar y sabes que eso no es posible. Y ya digo que no voy a permitir un modelo de financiación que perjudique a Extremadura. Si es así, no lo voy a aceptar'. Y continuó: 'Cree Javier Arenas, del PP, que si su partido llega a un acuerdo con la dirección de mi partido los demás iremos como borreguitos detrás; sé que no va a pasar porque cada día conozco más a José Luis y sé que no lo hará'.

La sintonía se comprobó posteriormente al advertir Zapatero de que no habría acuerdo de financiación autonómica si no se restituye a las autonomías socialistas 'lo que les quitó' el anterior modelo. Antes de que se firme un nuevo modelo, estas tres comunidades reclamarán lo que creen que les pertenece, por lo que la negociación empezará con malos presagios a pesar de que los principios generales que aprobó el PP en Santiago hace dos días son asumibles por los socialistas, cuyo proyecto coincide básicamente en la cesión a las comunidades de una cesta de impuestos para que los gestionen.

Rodríguez Ibarra también se refirió en el mitin a los cambios estatutarios que estudiará el PSOE en julio: 'Algunos tratan de que quienes hemos conseguido la confianza de los ciudadanos repetidamente nos vayamos, y está bien que haya renovación, pero me parece que hay que dejar a la gente que te quite y que te ponga'.