OPINIÓN DEL LECTOR

Celia Villalobos y las ratas de Los Asperones

Señora ministra de Sanidad: tan delicado ministerio absorberá sus días y sus noches se verán invadidas por la pesadilla de las vacas locas. Dedique un solo minuto, por favor, para recordar algo no tan lejano en su carrera política: Los Asperones. ¿Le dicen algo a la ex alcaldesa de Málaga? En Los Asperones hay actualmente un brote de tiña, ¡en el siglo XXI!. Pero la tiña no sólo la padecen los niños: las ratas que cada noche toman el barrio también tienen tiña, y los perros que se escapan de la perrera de la sociedad protectora de animales vecina para merodear entre las viviendas tienen tiña t...

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Señora ministra de Sanidad: tan delicado ministerio absorberá sus días y sus noches se verán invadidas por la pesadilla de las vacas locas. Dedique un solo minuto, por favor, para recordar algo no tan lejano en su carrera política: Los Asperones. ¿Le dicen algo a la ex alcaldesa de Málaga? En Los Asperones hay actualmente un brote de tiña, ¡en el siglo XXI!. Pero la tiña no sólo la padecen los niños: las ratas que cada noche toman el barrio también tienen tiña, y los perros que se escapan de la perrera de la sociedad protectora de animales vecina para merodear entre las viviendas tienen tiña también.

Es lástima que usted no supiera de antemano que iba a ocuparse de la salud de todos los españoles, hubiera sido una buena preparación intentar que en su ciudad -que tanto ama- no hubiera niños que convivieran con ratas y perros y jugaran en un basurero ubicado allí mismo. Esperémoslo del alcalde actual, aunque no vaya para ministro. La situación, el problema, es de salud pública y como tal debe resolverse, y con urgencia, que de algo le debe valer al pueblo de Málaga que su querida alcaldesa ocupe el puesto que ocupa. Sólo se le pide una buena receta, doña Celia, con o sin huesos, una receta que aleje de las ratas, los perros y el basurero a los niños, que son el futuro de esta España que va bien. Todos los niños son importantes, de cualquier etnia. Buena mar y viento favorable le deseo, señora, porque está embarcada en una difícil travesía, y a los niños les deseo salud, esa salud que ahora está en manos de las autoridades ¿competentes?-

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