Hasta seis años de cárcel por cooperar al suicidio

El Código Penal castiga con un máximo de seis años de cárcel la eutanasia activa, en tanto que cooperación al suicidio. Así lo establece el apartado 4 del artículo 143 del código, que entiende así esta práctica: "El que causare o cooperare activamente con actos necesarios y directos a la muerte de otro, por la petición expresa, seria e inequívoca de éste, en el caso de que la víctima sufriera una enfermedad grave que conduciría necesariamente a su muerte, o que produjera graves padecimientos permanentes y difíciles de soportar". Además de Holanda, la eutanasia está legislada en EE UU. Oregón a...

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El Código Penal castiga con un máximo de seis años de cárcel la eutanasia activa, en tanto que cooperación al suicidio. Así lo establece el apartado 4 del artículo 143 del código, que entiende así esta práctica: "El que causare o cooperare activamente con actos necesarios y directos a la muerte de otro, por la petición expresa, seria e inequívoca de éste, en el caso de que la víctima sufriera una enfermedad grave que conduciría necesariamente a su muerte, o que produjera graves padecimientos permanentes y difíciles de soportar". Además de Holanda, la eutanasia está legislada en EE UU. Oregón aprobó en 1994 la ley llamada Muerte con Dignidad, que entró en vigor. Pero en 1997 el 60% de los votos la aprobó: permite el suicidio asistido de los enfermos con expectativa de vida menor a seis meses. Los médicos pueden recetar, pero no administrar, sustancias letales a esos pacientes si éstos lo solicitan. En otros ocho Estados un enfermo terminal puede recibir ayuda médica.

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En Francia un informe del Comité de Ética de las Ciencias y la Salud recomienda una nueva figura legal, la "eutanasia de excepción" para casos "raros y excepcionales". La pasiva se penaliza como omisión de socorro a alguien en peligro, y la activa es homicidio.

Según la ley de Derechos de los Enfermos Terminales del Territorio del Noroeste de Australia en 1996, los médicos podían ayudar a morir, incluso a enfermos de otros puntos del país. Por sólo cinco votos, en 1997 fue derogada.

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