Los jabalíes han causado más de 110 accidentes de tráfico este año en Navarra

Los accidentes de tráfico provocados por jabalíes se han convertido en una verdadera plaga en Navarra. Durante 1999 se contabilizaron un centenar largo de casos y en lo va de 2000 son ya más de 110 los atropellos a animales, en su inmensa mayoría jabalíes, contabilizados por la Policía Foral. Se calcula que unos 15.000 de estos animales habitan el medio rural navarro y aunque las batidas se han intensificado en los últimos años (3.700 fueron cazados en 1999 y 4.000 en 1998) su número sigue creciendo. El resultado se mide en daños a la agricultura, accidentes de tráfico y el controvertido incre...

Los accidentes de tráfico provocados por jabalíes se han convertido en una verdadera plaga en Navarra. Durante 1999 se contabilizaron un centenar largo de casos y en lo va de 2000 son ya más de 110 los atropellos a animales, en su inmensa mayoría jabalíes, contabilizados por la Policía Foral. Se calcula que unos 15.000 de estos animales habitan el medio rural navarro y aunque las batidas se han intensificado en los últimos años (3.700 fueron cazados en 1999 y 4.000 en 1998) su número sigue creciendo. El resultado se mide en daños a la agricultura, accidentes de tráfico y el controvertido incremento de su caza.

Señales de advertencia

La gravedad de los daños materiales es alta y los atropellos han provocado este año tres heridos de diversa consideración. La estadística policial revela que los arrollamientos de jabalíes se producen en casi todos los puntos de la geografía foral, generalmente en horarios nocturnos o de madrugada. Ni siquiera la Autopista de Navarra (A-15) se salva de la plaga. Los vallados que la protegen son insuficientes para evitar la entrada de jabalíes en sus terrenos y en lo que va de año se han contabilizado 13 accidentes en la autopista. Tan sólo en el último fin de semana de octubre, estos animales provocaron cinco accidentes en puntos tan distantes como Egües, Liédena, Estella, Olite y Sarasa.Pasado el enorme susto que generan estos percances y cuando las patrullas policiales realizan los correspondientes atestados, la pregunta de los conductores afectados es: "¿Y a mí quién me paga ahora los daños?". La respuesta varía según el lugar donde se produce el accidente. Según explican fuentes del Departamento de Medio Ambiente del Gobierno de Navarra y de la propia Policía Foral, cuando el suceso es provocado por una especie cinegética, la responsabilidad recae en el seguro obligatorio del coto de caza correspondiente, siempre que el accidente se produzca dentro de su término. Si ocurre en un punto que no se corresponde con coto alguno o es causado por un animal procedente de algún espacio público protegido, es el Gobierno de Navarra el que se hace cargo de los daños ocasionados por el animal.

En 1999 el departamento de Medio Ambiente tramitó directamente 61 expedientes, mientras que el Servicio de Patrimonio del Gobierno se encargó de pagar los siete casos en que los daños superaron las 500.000 pesetas. En total, 5,2 millones de pesetas como indemnización a particulares y ayudas a cotos. Todo ello sin contar los pagos directos realizados por los cotos con seguro. Hay que tener en cuenta que estos animales pueden llegar a pesar bastante más de cien kilos y han provocado el siniestro total a más de un turismo.

A pesar de que las vías indemnizatorias son las reseñadas, la picaresca está arraigada y a algunos cotos les sale más barato carecer de seguro, ya que en tal caso siempre acaba pagando el Gobierno de Navarra. En todos los casos, la Policía Foral reitera que es requisito imprescindible el aviso a sus patrullas para que realicen fotografías del accidente y el correspondiente atestado que acredite que la causa fue la irrupción de este animal en la calzada. Fuentes de la Policía Foral señalan que más de un conductor ha intentado colar la figura del jabalí fantasma "que se cruzó ante mí huyendo después" como excusa perfecta para obtener indemnizaciones por accidentes que nada tenían que ver con estos animales. De nada les sirvió.Los ecologistas explican que muchas carreteras atraviesan vías y terrenos naturales de los jabalíes. "Los animales pasan por sus terrenos superando cualquier obstáculo y ellos son los que más caro lo pagan", explica un portavoz del movimiento ecologista.

De momento, el Gobierno ha instalado o va a instalar señales de advertencia en algunos tramos de carretera especialmente castigados, como el que va de Sorauren al puerto de Belate, en la N-121 Pamplona-Hendaya, y en la N-240, de Loiti hasta Yesa, en la carretera Pamplona-Jaca.