Dos empresas optan a la compra de la cárnica L'Agudana
Un grupo de cooperativas leridanas y una firma extranjera cuyo nombre no ha sido revelado son las dos únicas empresas que optan a la compra de la empresa cárnica L'Agudana, de Cervera (Segarra), que está en situación de quiebra desde hace un año, después de que al mediodía de ayer quedara cerrado el plazo para la presentación de ofertas. Las condiciones de los empresarios que aspiran a explotar el matadero no se conocerán hasta el próximo día 23.Una de las dos ofertas corresponde a un grupo de cooperativas leridanas, encabezadas por la Cooperativa de Artesa de Segre y Copalme de Almenar, cuyo...
Un grupo de cooperativas leridanas y una firma extranjera cuyo nombre no ha sido revelado son las dos únicas empresas que optan a la compra de la empresa cárnica L'Agudana, de Cervera (Segarra), que está en situación de quiebra desde hace un año, después de que al mediodía de ayer quedara cerrado el plazo para la presentación de ofertas. Las condiciones de los empresarios que aspiran a explotar el matadero no se conocerán hasta el próximo día 23.Una de las dos ofertas corresponde a un grupo de cooperativas leridanas, encabezadas por la Cooperativa de Artesa de Segre y Copalme de Almenar, cuyos responsables se han comprometido, en caso de ser los adjudicatarios, a mantener como mínimo el 90% de la plantilla actual del matadero y a invertir 500 millones de pesetas en la modernización de las instalaciones. Estas cooperativas, entre las que figuran los grupos Cotècnica y Copemo, controlarían todo el proceso productivo hasta llegar al consumidor.
La crisis de L'Agudana ha entrado en la fase decisiva para su resolución. Los anteriores propietarios, los hermanos Garriga Zafrilla, presentaron a finales de octubre de 1999 un expediente de declaración de quiebra voluntaria con una deuda de 6.500 millones. En aquel momento nadie hubiera apostado por la continuidad de una empresa a la que la Seguridad Social embargó todos sus ingresos para recuperar una deuda de más de 1.200 millones.
El mantenimiento de la actividad del matadero durante la crisis, gracias al esfuerzo de la plantilla y de los actuales gestores, ha hecho posible que dos empresas crean en su viabilidad, ya que se ha demostrado que la quiebra fue consecuencia de la mala gestión de la familia Garriga, que fue apartada de la dirección por el Juzgado de Cervera cuando éste intervino en la crisis nombrando comisario judicial a Ramon Guiu.
Desde el primer momento hubo empresas interesadas en la compra de L'Agudana, entre ellas un grupo de cooperativas leridanas del sector agroalimentario y algunas firmas holandesas y alemanas que buscaban abrir nuevos mercados en España.