Navarra y Baleares logran el pleno empleo 'técnico' al bajar del 5% su tasa de paro
Los datos de desempleo infundieron ayer un nuevo optimismo en las filas del Gobierno. Según la Encuesta de Población Activa (EPA) correspondiente al segundo trimestre del año, entre abril y junio se registraron 164.500 parados menos en España. Con este descenso, la tasa de desempleo se sitúa en el 13,97% de la población activa, la más baja desde 1981. Pero en dos comunidades autónomas el dato fue especialmente positivo: Navarra y Baleares. En ambas, la tasa de paro cayó por debajo del 5%, lo que la mayoría de economistas considera como pleno empleo desde un punto de vista técnico.
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Los datos de desempleo infundieron ayer un nuevo optimismo en las filas del Gobierno. Según la Encuesta de Población Activa (EPA) correspondiente al segundo trimestre del año, entre abril y junio se registraron 164.500 parados menos en España. Con este descenso, la tasa de desempleo se sitúa en el 13,97% de la población activa, la más baja desde 1981. Pero en dos comunidades autónomas el dato fue especialmente positivo: Navarra y Baleares. En ambas, la tasa de paro cayó por debajo del 5%, lo que la mayoría de economistas considera como pleno empleo desde un punto de vista técnico.
El riesgo del ciclo
Si los datos de la inflación conocidos la semana pasada rebasaron todas las previsiones, el índice de paro ha vuelto a sorprender, pero esta vez de forma positiva. La Encuesta de Población Activa, que analiza trimestralmente el mercado laboral español, demostró ayer que en el segundo trimestre del año la tasa de desempleo ha bajado del 15,01% de la población activa al 13,97%. "Si bajásemos así todos los trimestres, en poco tiempo alcanzaríamos la tasa de desempleo de la Unión Europea", señala Antonio Villarroya, analista de Merrill Lynch. Éste es el nivel más bajo registrado desde 1981, aunque los expertos advierten de que es arriesgado comparar unos datos cuya forma de medición ha sufrido modificaciones.El otro récord del trimestre pasado se dio en el desempleo masculino, que cayó hasta el 9,79%. Es la primera vez que se sitúa por debajo del 10% desde 1980. Además, el concepto del pleno empleo (un paro inferior al 5% de la población activa) comienza a hacerse realidad en algunas comunidades autónomas. Baleares, con un 4,67%, y Navarra, con un 4,70%, son las dos regiones que han pasado a formar parte de este selecto grupo.
Tasa de actividad baja
Los 164.500 parados menos que detectó la EPA han supuesto una reducción del 8,04% con respecto al mismo periodo de 1999. Aunque el porcentaje es bueno, fue mejor el del primer trimestre de 2000, cuando la bajada fue del 9,08%. Igual ocurre con la creación de empleo. El trimestre pasado se crearon 236.500 nuevos puestos, un 4,91% más que en las mismas fechas de 1999. Entre enero y marzo de este año, el crecimiento interanual del empleo fue del 5,25%.
No obstante, a la alegría coyuntural es preciso añadirle cautela. Los expertos anuncian un próximo estancamiento en el buen ritmo de la creación de empleo, ya que el crecimiento de la economía ha tocado techo y se prevé una desaceleración. Por el momento, tanto la reducción del paro como la creación de empleo muestran un ritmo positivo. El problema está en saber si esa tendencia perdurará una vez que la economía comience a suavizar su crecimiento (superior al 4%), como prevé el propio Gobierno. "Habría que ver qué parte de la creación de empleo se debe al crecimiento de la economía y cuál no, porque lo que interesa es el empleo estructural, no el cíclico", señala Antonio Villarroya. Según este analista, los datos de los próximos trimestres "no serán tan buenos", porque el crecimiento de la economía ya ha alcanzado su pico máximo y a partir de ahora se espera una cierta ralentización.
Una forma de detectar si el empleo creado es duradero o sólo está vinculado al boom económico es fijarse en la temporalidad. Según la EPA, en el segundo trimestre se crearon 127.600 empleos temporales, frente a 114.800 indefinidos. Los temporales aumentaron un 4,73% con respecto al año anterior, menos que los indefinidos, que lo hicieron un 7,58%. No obstante, un tercio de la población activa española sigue afectada por la temporalidad. Pablo Mansilla, economista jefe del Deutsche Bank para España, es reticente a considerar estable el empleo que se está creando: "No se observa un progreso en la ratio de temporalidad, que continúa estancada". El secretario general de Empleo, Juan Chozas, reiteró ayer que la lucha contra la temporalidad sigue siendo uno de los retos del Gobierno, informa Efe.
El paro sigue afectando de forma especial a la mujer. Hay 1.378.700 paradas frente a 966.800 hombres en la misma situación. En el segundo trimestre del año, el descenso del desempleo fue mayor en el hombre (9,79% interanual) que en la mujer (6,78%). La creación de empleo, sin embargo, repercutió de forma más positiva en la población femenina.
Precisamente en la incorporación de la mujer al mercado de trabajo está la solución a uno de los principales problemas del mercado laboral español: su baja tasa de actividad. En el segundo trimestre del año, el 51,18% de la población española está en disposición de trabajar, un 2,45% más que en el mismo periodo del año anterior. Pero este dato aún está lejos de alcanzar el 60% o 70% que se da en la Unión Europea, según los países y muy por detrás del 75% de Estados Unidos. Para el economista jefe del Deutsche Bank en España, lo importante a largo plazo no es el crecimiento económico, sino "que la fuerza de trabajo disponible crezca".El paro afecta especialmente a quienes buscan su primer empleo (499.400) y a los que lo perdieron hace tres años o más (423.700). Precisamente éstos fueron los dos sectores que registraron mayor descenso del desempleo interanual (un 18,27% y un 14,07% respectivamente). El único en el que aumentó el paro fue en agricultura, con 6.500 nuevos desempleados (un 9,09% que en el mismo periodo de 1999).
El aumento de la población activa y de la población ocupada en la segunda entrega de la EPA de este año no sólo responde a la buena marcha del empleo. Según los analistas de la consultora Schroder Salomon Smith Barney, la encuesta "probablemente exagera la actual fuerza del mercado de trabajo español, debido a los cambios en el modo de realizarla". Recientemente se han modificado algunos parámetros de la EPA para homogeneizarla conla Unión Europea. Estos cambios permitieron descubrir el trimestre pasado 77.500 nuevos empleos fijos y 8.500 parados más. Antonio Villarroya, de Merrill Lynch, cree que la limpieza de la EPA está haciendo aflorar una gran cantidad de activos y de ocupados que antes ya existían, pero a espaldas de esta medición.