ESCANCIAR ES COSA DE MUJERES
La sidra tampoco es ya un reducto masculino. Una mujer, Susana Ovín Ania, de 21 años, acaba de proclamarse vencedora en el campeonato de escanciadores de sidra que desde hace ocho años organiza la Asociación de Lagareros de Asturias. El primer varón clasificado tuvo que resignarse con el tercer puesto, porque el segundo también fue para otra mujer, Laura Ovín Ania, de 24 años, hermana mayor de la campeona. Laura ya se había proclamado campeona del concurso local de escanciado en este concejo sidrero en 1998. Ahora sólo su hermana menor ha sido capaz de superarla en el torneo autonómico. Ambas ...
La sidra tampoco es ya un reducto masculino. Una mujer, Susana Ovín Ania, de 21 años, acaba de proclamarse vencedora en el campeonato de escanciadores de sidra que desde hace ocho años organiza la Asociación de Lagareros de Asturias. El primer varón clasificado tuvo que resignarse con el tercer puesto, porque el segundo también fue para otra mujer, Laura Ovín Ania, de 24 años, hermana mayor de la campeona. Laura ya se había proclamado campeona del concurso local de escanciado en este concejo sidrero en 1998. Ahora sólo su hermana menor ha sido capaz de superarla en el torneo autonómico. Ambas forman parte de una acreditada dinastía de escanciadores del municipio de Nava. Susana y Laura se reconocen discípulas de su tío Constantino Ovín de la Vega, Tino el de la Barraca, uno de los más grandes echadores de sidra de la región y autor de un decálogo del buen escanciador que es como el manual elemental para quien quiera prosperar en el virtuoso arte de servir la sidra al más genuino estilo asturiano, es decir, con "el brazo bien arriba, el cuerpo recto y el chorro firme hacia el vaso", según explicaba Susana tras recibir el galardón de manos del consejero de Medio Rural y Pesca del Principado, Santiago Menéndez de Luarca.- ,