Expectación en México por la actuación de Espartaco mañana
El diestro ha estado ausente 14 años en la temporada mexicana
Hay gran expectación por ver torear mañana en México a Espartaco, quien desde hace 14 años no se presenta en ruedos mexicanos (actuó en Guadalajara, Jalisco, en 1982 y 1985). La afición mexicana por fin conocerá al matador que, consecutivamente, de 1985 a 1991 aguantó la dura responsabilidad de mantenerse como líder del escalafón y salió cinco veces a hombros en la Maestranza de Sevilla.
Como Espartaco también estuvo inactivo de 1995 a 1998 por haberse lesionado la rodilla derecha jugando al fútbol, sufrió cinco operaciones y este año retornó a los ruedos, la expectación se acentúa por ...
Hay gran expectación por ver torear mañana en México a Espartaco, quien desde hace 14 años no se presenta en ruedos mexicanos (actuó en Guadalajara, Jalisco, en 1982 y 1985). La afición mexicana por fin conocerá al matador que, consecutivamente, de 1985 a 1991 aguantó la dura responsabilidad de mantenerse como líder del escalafón y salió cinco veces a hombros en la Maestranza de Sevilla.
Como Espartaco también estuvo inactivo de 1995 a 1998 por haberse lesionado la rodilla derecha jugando al fútbol, sufrió cinco operaciones y este año retornó a los ruedos, la expectación se acentúa por conocer si sus facultades físicas y su oficio no han mermado.Su debú será en la tercera corrida de la temporada 1999-2000 de la Monumental Plaza México en un cartel de lujo. Espartaco llevará como padrino de su anhelada confirmación del doctorado nada menos que a la figura del toreo mexicano, Eloy Cavazos, y estará como testigo Alfredo Gutiérrez con un encierro de De Santiago.
El torero de Espartinas llegó a México el miércoles por la tarde y se trasladó al campo bravo para torear vaquillas, y ayer viernes lidió y mató dos toros a puerta cerrada en la plaza de San Juan de Atizapán, en el extrarradio del Estado de México.
Esta actitud de Espartaco da una muestra de su profesionalidad, ya que la gran mayoría de los espadas españoles llegan a México un día antes de su primera corrida y se enfrentan al astado mexicano sin conocerlo, pues su agresividad y su temperamento son distintos al del toro español. Este desconocimiento de la res brava mexicana es uno de los motivos por el cual los triunfos de los diestros hispanos son escasos cuando se presentan en México, sobre todo en la Monumental Plaza México.
La afición espera que con la experiencia que tiene Espartaco, quien en sus 20 años de alternativa ha participado en 1.210 corridas, se acople al son y al ritmo del burel mexicano y pueda demostrar su gran técnica y su clase.