La paga a pensionistas catalanes origina el primer choque electoral entre CiU y el PP

Rato: "El peor paso contra la Seguridad Social"

El Gobierno y sus socios de Convergéncia i Unió (CIU) ya han escenificado el primer encontronazo electoral sólo 24 horas después de ser convocadas las elecciones catalanas para el 17 de octubre. La Generalitat de Cataluña dio ayer por definitiva su decisión de abonar una paga de unas 8.000 pesetas a los 60.000 beneficiarios de pensiones no contributivas en esa comunidad. Rodrigo Rato, vicepresidente del Gobierno, asegura que se trata del "peor paso en los últimos 20 años contra la Seguridad Social".

En contra de las advertencias del Gobierno, que ya anunció su intención de recurrir la i...

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El Gobierno y sus socios de Convergéncia i Unió (CIU) ya han escenificado el primer encontronazo electoral sólo 24 horas después de ser convocadas las elecciones catalanas para el 17 de octubre. La Generalitat de Cataluña dio ayer por definitiva su decisión de abonar una paga de unas 8.000 pesetas a los 60.000 beneficiarios de pensiones no contributivas en esa comunidad. Rodrigo Rato, vicepresidente del Gobierno, asegura que se trata del "peor paso en los últimos 20 años contra la Seguridad Social".

En contra de las advertencias del Gobierno, que ya anunció su intención de recurrir la iniciativa catalana, el Ejecutivo de Jordi Pujol no sólo advirtió ayer de que aprobará esa paga el próximo 31 de agosto, sino que pretende aplicarla todos los años en los que la inflación resultante en Cataluña supere la media nacional.

Pese a todo, CiU no persigue una ruptura total con el PP en este terreno. Así, en la propia Generalitat se asegura que CiU desea pactar con el Gobierno de Aznar propuestas sobre pensiones en la reunión del Pacto de Toledo prevista para el mes próximo. A la vez, Pujol dio ayer instrucciones a sus colaboradores para que no respondieran a las palabras de Rato, aunque dejó claro que la paga a los pensionistas catalanes no tiene marcha atrás, pese a las advertencias lanzadas desde Madrid.

Lo ocurrido ayer entre Pujol y Rato confirma dos hechos: de un lado, que España está inmersa ya en un clima electoral que no se detendrá al menos hasta abril del año próximo; de otro, que el debate de las pensiones será uno de los temas centrales de la pugna entre los partidos. También en ese ambiente electoral, el candidato socialista Pasqual Maragall señaló ayer que "los catalanes no se merecen cuatro años de agonía con Pujol".

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