Vizcaya impondrá el primer impuesto por dejar basura en los vertederos

La Diputación vizcaína ha decidido poner en marcha para el año 2001 un nuevo impuesto por depositar la basura en los vertederos a los 111 municipios de la provincia y a las empresas que los utilizan. El tributo, novedoso en España, pero que ya se utiliza en varios países europeos, se regulará a lo largo del próximo año en una norma foral y se baraja una cifra cercana a las 1.000 pesetas por tonelada de basura (el consumo anual de un hogar de tres personas). El impuesto repercutiría directamente en el recibo de basura domiciliario, pero, sobre todo, en el sector hostelero o en centros como Merc...

La Diputación vizcaína ha decidido poner en marcha para el año 2001 un nuevo impuesto por depositar la basura en los vertederos a los 111 municipios de la provincia y a las empresas que los utilizan. El tributo, novedoso en España, pero que ya se utiliza en varios países europeos, se regulará a lo largo del próximo año en una norma foral y se baraja una cifra cercana a las 1.000 pesetas por tonelada de basura (el consumo anual de un hogar de tres personas). El impuesto repercutiría directamente en el recibo de basura domiciliario, pero, sobre todo, en el sector hostelero o en centros como Mercabilbao, que generan grandes volúmenes de desechos. El objetivo que se busca con la creación de este nuevo impuesto es reducir el ingente volumen de basura doméstica que se genera en Vizcaya: cerca de un millón de toneladas anuales entre la bolsa de basura, los desechos de la industria o el comercio y los inertes, como los escombros o escorias, según los datos que maneja la Diputación foral. Una directiva de la Unión Europea establece que la gestión de la basura mediante el depósito en vertederos debe quedarse en el año 2001 por debajo del 50% -en Vizcaya ahora se sitúa en el 83% cuando en 1994 alcanzaba el 94%-, por lo que el resto se reciclaría o incineraría. La normativa europea señala también que la basura orgánica sólo puede suponer en 2002 el 75% del total de desechos que se vertían en 1993, un porcentaje que se debe reducir al 50% en 2005 y al 25% para el año 2010. "¿Cómo logras esto? O se presiona o no se consigue", reconocía el lunes pasado la diputada de Medio Ambiente, María Esther Solabarrieta. PASA A LA PÁGINA 3