El Gobierno catalán aprueba un plan contra la anorexia sin fijar dotación económica

El Consell Executiu aprobó ayer un plan de lucha contra la anorexia que implica a cuatro departamentos de la Generalitat y tres organismo gubernamentales, algo que el consejero de Sanidad, Eduard Rius, calificó como muy innovador. El programa contiene diferentes líneas de actuación, pero no especifica ninguna dotación económica para desarrollarlos, lo que ha provocado suspicacias en la oposición, que teme que quede en una operación publicitaria.

El Parlamento catalán aprobó en noviembre pasado una proposición no de ley presentada por el PSC en la que se instaba al Gobierno catalán a ela...

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El Consell Executiu aprobó ayer un plan de lucha contra la anorexia que implica a cuatro departamentos de la Generalitat y tres organismo gubernamentales, algo que el consejero de Sanidad, Eduard Rius, calificó como muy innovador. El programa contiene diferentes líneas de actuación, pero no especifica ninguna dotación económica para desarrollarlos, lo que ha provocado suspicacias en la oposición, que teme que quede en una operación publicitaria.

El Parlamento catalán aprobó en noviembre pasado una proposición no de ley presentada por el PSC en la que se instaba al Gobierno catalán a elaborar un plan interdepartamental contra la anorexia. El plan que ayer aprobó el Consell Executiu es fruto del trabajo realizado por una comisión creada el pasado mes de diciembre, en la que profesionales de diferentes ámbitos han concretado las líneas de actuación que deben realizarse para prevenir y tratar adecuadamente la anorexia y la bulimia. Estos trastornos de la alimentación afectan al 4,5% de las personas de edad comprendida entre 13 y 30 años. En el 30% de los casos la enfermedad es crónica y en el 6% provoca la muerte. Los especialistas consideran de suma importancia la prevención y la detección precoz. En este ámbito, el plan prevé cursos de formación específica para los profesionales de asistencia primaria y la inclusión de los trastornos de la alimentación en los programas escolares de educación para la salud, con "acciones específicas en los comedores escolares". También se elaborarán, según el plan, protocolos de actuación para los casos en los que se detecten indicios de anorexia y bulimia. Al Departamento de Industria, Comercio y Turismo se le encomienda contactar con la industria de la moda y la publicidad para evitar que se difunda como modelo a seguir un estereotipo de delgadez excesiva perjudicial para la salud. Desde organismos como el Instituto Catalán de la Mujer, la Secretaria General de Juventud y la Secretaría General de Deportes se prevén también campañas y acciones de prevención y formación, aunque no se concreta qué tipo de intervenciones. Bienestar Social se ocupará de promover las asociaciones de autoayuda y el voluntariado. Nuevas unidades A Sanidad le corresponde la parte más importante del plan en lo referente a tratamientos. Los cuatro grandes hospitales que ahora tienen unidad de anorexia -Bellvitge, Can Ruti, Sant Joan de Déu y el Clínic- están completamente desbordados y la lista de espera para recibir tratamiento supera los seis meses. Recientemente, Sanidad concertó la apertura de una unidad de hospitalización con la Mutua de Terrassa y anunció la apertura de otra en el hospital Joan XXIII de Tarragona. El plan prevé crear en 1999 unidades de referencia en los hospitales Santa Maria de Lleida y Santa Caterina de Girona. El consejero de Sanidad, Eduard Rius, admitió ayer que la aplicación completa del plan requiere una importante dotación económica, pero reconoció que aún no se ha cuantificado.

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