El Gobierno sabe que la mayoría rechaza los bombardeos

"Si el Gobierno no gana a una mayoría de la opinión pública, de nada valdrá la participación de España en la operación de la OTAN en Serbia". La advertencia de Borrell a Aznar parecía innecesaria.En teoría, el apoyo de los grupos parlamentarios a los bombardeos sobre Yugoslavia es tan amplio que la controversia política resulta irrelevante. Sólo Izquierda Unida y el Bloque Nacionalista Galego se pronunciaron de forma contundente y expresa en contra de la operación, lo que representa cuantitativamente poco más del 10% del electorado.

Sin embargo, el Gobierno sabe, porque dispone de datos...

"Si el Gobierno no gana a una mayoría de la opinión pública, de nada valdrá la participación de España en la operación de la OTAN en Serbia". La advertencia de Borrell a Aznar parecía innecesaria.En teoría, el apoyo de los grupos parlamentarios a los bombardeos sobre Yugoslavia es tan amplio que la controversia política resulta irrelevante. Sólo Izquierda Unida y el Bloque Nacionalista Galego se pronunciaron de forma contundente y expresa en contra de la operación, lo que representa cuantitativamente poco más del 10% del electorado.

Sin embargo, el Gobierno sabe, porque dispone de datos, y el PSOE sospecha, que la mayoría de los españoles son contrarios a la intervención militar. Como ya ocurrió durante la guerra del Golfo y en el referéndum de la OTAN, la opinión de los representantes políticos no refleja exactamente la de sus votantes.

El discurso de Borrell, condicionado por el hecho de que su compañero de partido Javier Solana sea el secretario general de la OTAN, fue mucho más crítico con la intervención de lo que se esperaba.

En el PSOE, de forma privada o pública, algunos dirigentes -el diputado de Izquierda Socialista Antonio García Santesmases, la eurodiputada Francisca Sauquillo, el candidato a la Alcaldía de Madrid Fernando Morán y varios miembros del antiguo sector guerrista- han cuestionado ya el ataque y es seguro que estas voces irán en aumento si se prolonga e intensifica.

En el extremo contrario se sitúa el eurodiputado José María Mendiluce, partidario de que la OTAN intervenga también con tropas terrestres.

Reservas de los grupos

Anguita tuvo ayer en el Congreso casi el monopolio de la oposición al bombardeo, pero incluso quienes reconocieron la necesidad de frenar el genocidio en Kosovo, no dejaron de expresar sus reservas hacia la intervención de la OTAN.El portavoz del PNV, Jon Zabalía, criticó la "distinta vara de medir" que se utiliza para juzgar las violaciones de los derechos humanos de los kosovares y de los kurdos.

José Carlos Mauricio, de Coalición Canaria, recordó que la intervención ha violado las normas del derecho internacional. Hasta el portavoz del Grupo Catalán, Joaquín Molins, desde el pleno respaldo a la operación, no dejó de reconocer sus riesgos.

Fuentes gubernamentales reconocen que durante la última semana las voces contrarias al ataque de la OTAN han acaparado los medios de comunicación y se muestran preocupadas por el amplio eco obtenido por los futbolistas yugoslavos que juegan en la liga española.