Rato: "El Gobierno garantizará el respeto a los derechos de los consumidores"
El vicepresidente segundo y ministro de Economía, Rodrigo Rato, manifestó ayer, en relación con la fusión entre los bancos Central Hispano y el Santander, que el Gobierno garantizará el respeto a los derechos de los consumidores". Rato, que se encontraba en Formigal (Huesca), dijo que "lo que el Gobierno ha de hacer es garantizar que las reglas sean iguales para todos y que se mantengan altos niveles de competencia y eficacia", informa Efe.
El Banco Santander Central Hispano (BSCH) controla el 19,2% de la inversión crediticia en España, el 18,7% de los depósitos y el 22,8% de los fondos...
El vicepresidente segundo y ministro de Economía, Rodrigo Rato, manifestó ayer, en relación con la fusión entre los bancos Central Hispano y el Santander, que el Gobierno garantizará el respeto a los derechos de los consumidores". Rato, que se encontraba en Formigal (Huesca), dijo que "lo que el Gobierno ha de hacer es garantizar que las reglas sean iguales para todos y que se mantengan altos niveles de competencia y eficacia", informa Efe.
El Banco Santander Central Hispano (BSCH) controla el 19,2% de la inversión crediticia en España, el 18,7% de los depósitos y el 22,8% de los fondos de inversión. Además, tiene el 16,8% de los cajeros y el 16,7% de las oficinas.
El nuevo grupo bancario cuenta con unos activos totales de 237.074 millones de euros (39,4 billones de pesetas), y el año pasado habría obtenido un beneficio neto de 1.249, 5 millones de euros (207.900 millones de pesetas).
El BSCH, que es el primer grupo financiero de Latinoamérica, tiene una plantilla de 102.530 personas, de las cuales 53.763 trabajan fuera de España. Precisamente ayer, la responsable de banca de CC OO, María Jesús Paredes, señaló que espera un rápido acuerdo laboral en Banesto, tras el recientemente suscrito con el nuevo BSCH. En cuanto a oficinas, el grupo totaliza 8.868, de las que 6.483 están en España.
La dirección del BSCH también ha establecido un plan de objetivos recogido en el denominado Programa UNO, que abarca dos años.
En cuanto a los beneficios, la previsión es que aumenten a un ritmo anual del 25% acumulativo, con lo cual se colocarán en 1.953,28 millones de euros (325.000 millones de pesetas) en el año 2000. Mejorar la eficiencia, la rentabilidad y un fuerte ahorro de costes (100.00 millones a partir del tercer año) son otros de los objetivos prioritarios del nuevo banco. Para América, que tiene un plan específico a tres años, la meta consiste en alcanzar al menos el 10% de la cuota de mercado en cada país en el que esté presente.
El objetivo de capitalización bursátil es colocarlo cuanto antes al borde de los siete billones de pesetas. Está en 5,6 billones.