Dimensiones desconocidas

El grito de la guerra comercial es siempre el mismo: ¡Qué viene El Corte Inglés! Y a su rebufo se encienden las alarmas en todos los sectores. El último episodio de esa perenne controversia entre el comercio minoritario tradicional y la implantación de grandes espacios comerciales le ha costado al Gobierno de Navarra tener que retirar de su tramitación parlamentaria todo un proyecto de ley de regulación de grandes superficies ante el rechazo unánime de la oposición. El Ejecutivo de UPN-PP pretendía aplicar una moratoria de al menos seis meses en la concesión de licencias para abrir nuevas gra...

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El grito de la guerra comercial es siempre el mismo: ¡Qué viene El Corte Inglés! Y a su rebufo se encienden las alarmas en todos los sectores. El último episodio de esa perenne controversia entre el comercio minoritario tradicional y la implantación de grandes espacios comerciales le ha costado al Gobierno de Navarra tener que retirar de su tramitación parlamentaria todo un proyecto de ley de regulación de grandes superficies ante el rechazo unánime de la oposición. El Ejecutivo de UPN-PP pretendía aplicar una moratoria de al menos seis meses en la concesión de licencias para abrir nuevas grandes superficies en Navarra. Pero dos proyectos empresariales de implantación de grandes superficies comerciales se cruzaron en su camino y al final no habrá parálisis en la tramitación legal ordinaria de las licencias. Los grupos parlamentarios navarros no creen necesarios nuevos instrumentos legales para regular este sector. Ni siquiera creen que haya vacío normativo. Navarra tiene competencias exclusivas en la materia y una regulación foral sobre implantación territorial y urbanística de estas instalaciones, así como el desarrollo, ya realizado, de la legislación básica estatal de 1996 que somete toda apertura a la concesión previa de licencias comerciales específicas (las denominadas segundas licencias) por parte de los gobiernos autonómicos. De manera que la derrota gubernamental ha alertado al pequeño y mediano comercio y ha permitido a los promotores de la firma Riocenter S.L. albergar esperanzas de ver aprobada su propuesta para construir en Bañaran, municipio colindante con Pamplona, un gran centro comercial y de ocio de 130.000 metros cuadrados, que implicará una inversión de 17.650 millones de pesetas y supondrá 1.700 empleos directos, según las cifras aportadas por la empresa. Detrás de Riocenter están El Corte Inglés y su filial Hipercor. Así lo confirma el sondeo de opinión realizado por los promotores entre 1.200 ciudadanos navarros, aunque después no se haya aludido expresamente a la presencia de las empresas del Grupo Corte Inglés (El Corte Inglés, Hipercor, Tiendas Corty) en la documentación barajada por la Administración. De igual manera, el proyecto de varios empresarios locales para construir otra gran superficie (46.000 metros cuadrados para comercio y ocio) en Ripagaina, junto a Burlada, dentro de un plan urbanístico de construcción de 3.000 nuevas viviendas, seguirá una tramitación ordinaria no sometida a los dictados de estudios previos de demanda u oferta de este tipo de superficies. Como es natural, la Cámara Navarra de Comercio e Industria se ha opuesto tajantemente al proyecto de Riocenter S.L. El pleno de la Cámara apostó por regular mediante una ley foral el modelo territorial y reiteró que no debe implantarse ninguna gran superficie más en Navarra en tanto un estudio exhaustivo "no establezca las deficiencias y el superávit de equipamiento comercial" de cada zona. Los pequeños y medianos comerciantes (en Navarra hay 8.294 establecimientos comerciales) ponen además en duda la veracidad de algunas de las cifras aportadas por estos nuevos promotores mientras las asociaciones de consumidores aplauden cualquier iniciativa que redunde en ofertas más amplias de productos y servicios y contribuya a crear abanicos de precios más asequibles para la ciudadanía. Partidos políticos Los partidos políticos están de acuerdo en realizar un estudio previo de necesidades, pero algunos piensan que bajo esa pretensión puede esconderse la intención de recortar la autonomía municipal (ya supeditada a la segunda licencia que los gobiernos autonómicos deben conceder) para actuar sobre su territorio conforme a su planteamiento y en ejercicio de sus competencias y que responde a presiones de sectores interesados que obstaculizan iniciativas muy importantes para la inversión y el empleo, especialmente el femenino. De momento, la licencia solicitada por Riocenter el pasado noviembre, junto a las opiniones de comerciantes y consumidores, se elevó al Tribunal de Defensa de la Competencia de Madrid en enero para obtener el informe, no vinculante, que determine qué efectos puede provocar la apertura de un nuevo espacio de El Corte Inglés en Navarra.Paradójicamente, en Navarra no existe aún ningún gran centro comercial que combine servicios de todo tipo y una oferta de ocio. Únicamente están implantados dos hipermercados (E. Leclerc y Eroski) en la capital navarra dedicados esencialmente a la alimentación, con algunos servicios comerciales añadidos y existen iniciativas para ampliarlos al terreno del ocio y abrir dos medianos centros comerciales en terrenos urbanos (Centro Comercial del Sadar y Pryca). Todo ello elevará, según la Cámara de Comercio, a 72 metros cuadrados por cada 1.000 habitantes el ratio comercial de la capital navarra, muy por encima de la media española. No obstante, las dimensiones del proyecto de Riocenter son desconocidas en Navarra: gran almacén e hipermercado; 135 negocios de equipamiento, hogar y servicios, área de ocio con multicines, bolera, restauración y parques infantiles. Sólo las 2.500 plazas de aparcamiento necesarias muestran las proporciones de un negocio "que modificará contundentemente la estructura comercial de la región", según el comercio tradicional.

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