Ir al contenido

El socialista Vázquez pide al Papa un obispado para A Coruña

Francisco Vázquez, alcalde de ACoruña y hasta hace unos meses líder del PSOE gallego, no cesa de ofrecer pruebas de que, además de socialista, es también un católico muy devoto. Tras proclamar a los cuatro vientos su oposición a la ley del aborto, Vázquez volvió ayer a dejar boquiabiertos a muchos de sus compañeros de partido al encabezar con su firma una campaña para pedir al Papa la creación de un obispado en A Coruña, que ahora pertenece a la diócesis de Santiago. "Lo hago como alcalde, como ciudadano y como cristiano", explicó Vázquez, para rechifla del PSOE compostelano, que considera la ...

Google te da acceso gratuito a esta noticia

Y a todo el contenido de EL PAÍS durante 30 días. Gratis, sin tarjeta.

Francisco Vázquez, alcalde de ACoruña y hasta hace unos meses líder del PSOE gallego, no cesa de ofrecer pruebas de que, además de socialista, es también un católico muy devoto. Tras proclamar a los cuatro vientos su oposición a la ley del aborto, Vázquez volvió ayer a dejar boquiabiertos a muchos de sus compañeros de partido al encabezar con su firma una campaña para pedir al Papa la creación de un obispado en A Coruña, que ahora pertenece a la diócesis de Santiago. "Lo hago como alcalde, como ciudadano y como cristiano", explicó Vázquez, para rechifla del PSOE compostelano, que considera la iniciativa "ridícula".Hasta ahora, las pugnas localistas entre Santiago y A Coruña se ceñían a lo terrenal: fútbol, reparto de juzgados, inversiones en aeropuertos o ayudas públicas a las orquestas sinfónicas. Pero la controversia ha escalado ahora a alturas celestiales.

Vázquez compareció ayer para firmar con toda la solemnidad la primera de una serie de postales navideñas que la comunidad cristiana Home Novo enviará en los próximos días al Vaticano a fin de reclamar un obispado propio en la ciudad. La fe mueve tantas montañas que a Vázquez ni siquiera le importó que la tarjeta esté redactada en gallego, idioma del que se ha mofado más de una vez.

El promotor de la iniciativa, el sacerdote Manuel Espiña, alega que la dependencia de Santiago ha provocado un alejamiento entre la curia eclesiástica y los feligreses y el clero coruñés. Según Espiña, hay curas que llevan más de 20 años sin poder hablar con el arzobispo de Santiago, ya que éste tiene a su cargo una diócesis excesivamente amplia, con 1.100 parroquias y más de un millón de fieles.

El hipotético obispado de A Coruña, que sería el octavo de Galicia, englobaría a medio millón de habitantes.

Sobre la firma

Archivado En