Reportaje:

Llega el primer medicamento contra la obesidad

La lucha contra la obesidad es uno de esos ámbitos en los que los laboratorios buscan desde hace tiempo su Santo Grial. Al menos 45 compañías están investigando un fármaco para adelgazar. Xenical (orlistap) es uno de los que están en la rampa final de despegue. En julio pasado obtuvo la aprobación de la Unión Europea y en España está pendiente de que se fije el precio.El Xenical es el primer medicamento antiobesidad que llega al mercado. Antes se habían utilizado los anorexígenos, básicamente derivados de las anfetaminas, como la centramina, que actúan sobre el sistema nervioso central. Como e...

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La lucha contra la obesidad es uno de esos ámbitos en los que los laboratorios buscan desde hace tiempo su Santo Grial. Al menos 45 compañías están investigando un fármaco para adelgazar. Xenical (orlistap) es uno de los que están en la rampa final de despegue. En julio pasado obtuvo la aprobación de la Unión Europea y en España está pendiente de que se fije el precio.El Xenical es el primer medicamento antiobesidad que llega al mercado. Antes se habían utilizado los anorexígenos, básicamente derivados de las anfetaminas, como la centramina, que actúan sobre el sistema nervioso central. Como efecto colateral, estos fármacos disminuyen el apetito y mejoran el tono vital de las personas sometidas a la tortura de una dieta hipocalórica. Pero su uso ha demostrado importantísimos efectos adversos y un potencial adictivo muy peligroso, de modo que están en retirada.

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El Xenical, en cambio, actúa por otra vía: bloquea la absorción de la grasa en el intestino. "Está indicado para personas con obesidad mórbida que tienen factores de riesgo asociados", explica José Félix Olalla. "Sus resultados no son tan espectaculares como se ha pretendido: cinco estudios realizados durante dos años han demostrado que el 20% de los pacientes han perdido más del 10% del peso corporal. Pero hay que tener en cuenta que se ha ensayado en pacientes que hacen al mismo tiempo una dieta hipocalórica y que entre los obesos del grupo de control, que tomaban un placebo sin saberlo, el 8% perdió también más de un 10% de peso". El problema es el uso que se vaya a hacer de este medicamento habida cuenta de altísimo porcentaje de personas que acuden a los más peligrosos camelos con tal de perder peso.

Con el Xenical, el laboratorio suizo Hoffman-La Roche ha encontrado su medicamento diana porque si algo hay en el mundo rico son obesos, una afección que crece al ritmo de un 1% anual. Sólo en Estados Unidos son 61 millones. En España, el 13,4% de la población de 25 a 60 años es obesa, a la que hay que añadir un 39,5% que tiene sobrepeso y que es un excelente candidato a un uso inadecuado del nuevo fármaco.

Un uso inadecuado puede tener graves consecuencias. Sólo hay que leer la lista de efectos adversos: afeccciones gasterointestinales, heces grasientas, incontinencia fecal, flatulencia, fatiga, ansiedad. Algunos estudios indican que el 24% de las personas medicadas presentan flatulencia con incontinencia. También se ha sugerido un aumento del cáncer de mama en las mujeres, pero sólo estudios a más largo plazo podrán confirmarlo.

También en fase final de experimentación se encuentra otra droga contra la obesidad, denomiada Meridia, que desarrolla el laboratorio alemán Knoll. Este medicamento eleva el nivel de la leptina en el cerebro, una sustancia que controla la sensación de saciedad. Pero los ensayos clínicos demuestran que puede aumentar la presión arterial y el riesgo de dolencia cardiaca en algunas personas.

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