Casi 30.000 estudiantes, el 83,2% de los examinados, superan la selectividad

Un total de 29.764 madrileños conocieron ayer que habían aprobado el temido examen de selectividad. Los que salieron airosos de la prueba fueron el 83,2% de los presentados, un porcentaje de éxito que mejora en seis décimas el obtenido por los jóvenes en la convocatoria de 1997. Los resultados también han sido mejores para los futuros universitarios provenientes de la LOGSE: aprobaron casi el 79%, frente al 76% de hace un año.

Superado el primer gran escollo, el desasosiego estudiantil se prolongará todavía hasta el 31 de julio. Ése es el día en el que las seis universidades públicas ma...

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Un total de 29.764 madrileños conocieron ayer que habían aprobado el temido examen de selectividad. Los que salieron airosos de la prueba fueron el 83,2% de los presentados, un porcentaje de éxito que mejora en seis décimas el obtenido por los jóvenes en la convocatoria de 1997. Los resultados también han sido mejores para los futuros universitarios provenientes de la LOGSE: aprobaron casi el 79%, frente al 76% de hace un año.

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Superado el primer gran escollo, el desasosiego estudiantil se prolongará todavía hasta el 31 de julio. Ése es el día en el que las seis universidades públicas madrileñas darán a conocer las notas de corte para estudiar en sus facultades. En el mejor de los casos, uno de cada tres nuevos universitarios no podrá estudiar la carrera que más desea.Como la matriculación en uno u otro centro puede ser cuestión de décimas, ayer no eran pocos los chavales que expresaban su intención de pedir una revisión de su examen, convencidos de que podrían mejorar sus calificaciones. Esta operación puede realizarse hasta el próximo día 8, si bien las posibilidades de éxito son relativas: por la experiencia de años anteriores, sólo araña alguna décima menos del 10% de los reclamantes.

Los datos conocidos ayer constatan que en la selectividad es más fácil aprobar que obtener buenas calificaciones. Por ejemplo, entre los 7.991 aprobados por la Autónoma de COU (el 85,3% del total), el 38% no pudo pasar del 6, y el 35,5% se conformó con una nota entre 6 y 7. Sólo el 1,7% superó el 8,5.

Ayuda extraoficial

Más motivos de satisfacción encontraron las universidades a cuenta de los alumnos provenientes de 2º de Bachillerato (LOGSE). Sus resultados aún están casi cinco puntos por debajo de los de sus compañeros de COU, pero han mejorado sensiblemente el 76% de sus antecesores de 1997. La vicerrectora de alumnos de la Complutense, María Teresa Fernández-Pacheco, cree conocer las razones. "Hemos mantenido reuniones orientativas con los institutos. Las estaban demandando y han dado sus frutos. La coordinación universitaria no se establece en la LOGSE, así que la nuestra ha sido una ayuda extraoficial", relató.La corrección de las pruebas (en total, unos 260.000 exámenes) se ha prolongado durante cinco días frenéticos y sin mayores incidentes. No ha habido que lamentar esta vez ningún caso pucelano -el adjetivo por el que preguntaba un examen de Lengua de hace tres años, y que no figura en el diccionario-, aunque sí se produjo un pequeño de-saguisado con uno de los problemas de la asignatura de Química. Las sucesivas revisiones de los ejercicios no evitaron que se escurriera una densidad que convertía el problema en irresoluble. "Lo hemos corregido sobre la marcha, y esa pregunta se ha puntuado por su desarrollo, no por el resultado final", detalló un integrante de la comisión interuniversitaria para la selectividad.

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En la clasificación por campus, la Complutense se mantiene por segundo año consecutivo en la primera posición, con un 85,6% de aprobados en COU. Para esa décima parte de examinandos que provenían del modelo de la LOGSE, los mejores resultados los ha obtenido la novísima Rey Juan Carlos (82,9%), que debutaba este mismo año. La alegría era plena en el instituto Rayuela de Móstoles, que vio cómo aprobaban sus 21 alumnos, informa Susana Moreno. Su directora, Ofelia García, atribuyó el éxito a la "extraordinaria constancia" de sus alumnos en la asistencia a clase. Y uno de los aludidos, Javier Ramos -8,55 de nota-, presumía: "Haré Ingeniería Industrial, pero con mi nota podría entrar en cualquiera".

La otra cara la constituyen los 5.993 chavales que se encontraron con un suspenso. Para ellos queda la tenue esperanza de septiembre, una convocatoria en la que sólo suelen quedar plazas en Filosofía, Filologías y alguna de Derecho.

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