LA MAESTRANZA

Cristo y Valderrama no salen a flote

Está claro que en el toreo, al final cada uno ocupa el lugar que se merece. Por eso Domingo Valderrama y Cristo González, que desaprovecharon ayer en la Maestranza las embestidas de los toros tercero y quinto, no salen a flote.

Valderrama, torero al que no puede negársele una entrega, y lo demostró en la pasada Feria de Abril delante de uno de Miura, ayer no vio clara la embestida de su primer toro, hasta que el veterano José Luis Parada le hizo un quite a la verónica.

Antes, Valderrama estuvo peleón con el capote, pero la cosa no era así. Ese toro embistió mucho en la muleta...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Está claro que en el toreo, al final cada uno ocupa el lugar que se merece. Por eso Domingo Valderrama y Cristo González, que desaprovecharon ayer en la Maestranza las embestidas de los toros tercero y quinto, no salen a flote.

Valderrama, torero al que no puede negársele una entrega, y lo demostró en la pasada Feria de Abril delante de uno de Miura, ayer no vio clara la embestida de su primer toro, hasta que el veterano José Luis Parada le hizo un quite a la verónica.

Antes, Valderrama estuvo peleón con el capote, pero la cosa no era así. Ese toro embistió mucho en la muleta, viniéndose arriba, y Valderrama, que perdía una y otra vez el sitio, aunque dio derechazos espectaculares, acabó a merced del astado.

Maza / Parada, González, Valderrama

Toros del Conde de la Maza (5º, sobrero, en sustitución de uno cojo), bien presentados; 1º, con peligro; resto, bajos de raza y manejables. José Luis Parada: palmas y ovación. Cristo González: ovación y saludos; palmas. Domingo Valderrama: petición y vuelta; palmas.Plaza de la Maestranza, 11 de junio. Corrida del Corpus. Media entrada

En el sexto, violento y con genio, abrevió y se llevó un susto cuando, queriendo entrar a matar, el toro le apretó y arrolló.

Cristo González no acabó de entender a su primer toro, abanto y mansón como fue toda la corrida. Ese astado, en la muleta fue más templado, aunque se apagó pronto, pero el torero se perdió cuando el del conde se le coló en un derechazo.

El sobrero todavía embistió más y duró más en la muleta, pero Cristo González, entre pase y pase, necesitó respirar mucho, más de la cuenta. Cuajó algún que otro derechazo pero su faena no tuvo continuidad.

A cargo del veterano José Luis Parada se vieron los momentos más toreros de la tarde. En el toro que abrió plaza, con casta y genio, que quería coger, abrevió después de una lidia por bajo y mató pronto.

Pero fue en el cuarto, blando y aplomado pero más dócil, donde el sanluqueño toreó con calidad. Había lucido con el capote de salida, y en la faena de muleta, sobre ambas manos exprimió y templó la sosa embestida del toro

Pero como Parada es torero sobrio y clásico, que no hace concesiones a la galería, y de esto había mucho en la Maestranza, de ahí que su actuación no remontara más alto vuelo.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Archivado En