El cadáver hallado en Córcega es el del desaparecido tras una riada

Las pruebas de ADN han confirmado que el cadáver hallado el pasado mes de abril en las costas de la isla francesa de Córcega corresponde al vecino de Barcelona José Celaya, de 72 años, que desapareció el 26 del pasado mes de noviembre al ser arrastrado por la riada en Canet de Mar (Maresme). Entre el lugar en el que fue encontrado el cadáver y el punto de desaparición hay 500 kilómetros de distancia. Joaquín Celaya, uno los hijos de la víctima explicó ayer que el lunes recibió una llamada de la policía de Córcega que le confirmó que el cuerpo localizado en la costa de aquella isla era el de...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Las pruebas de ADN han confirmado que el cadáver hallado el pasado mes de abril en las costas de la isla francesa de Córcega corresponde al vecino de Barcelona José Celaya, de 72 años, que desapareció el 26 del pasado mes de noviembre al ser arrastrado por la riada en Canet de Mar (Maresme). Entre el lugar en el que fue encontrado el cadáver y el punto de desaparición hay 500 kilómetros de distancia. Joaquín Celaya, uno los hijos de la víctima explicó ayer que el lunes recibió una llamada de la policía de Córcega que le confirmó que el cuerpo localizado en la costa de aquella isla era el de su padre, como acreditan los resultados comparados del análisis de las pruebas de ADN efectuadas a varios miembros de la familia. Celaya añadió que los trámites de la repatriación del cadáver son lentos, por lo que, tal como le han comunicado las autoridades responsables de la gestión, podrían transcurrir aún entre dos y tres semanas antes de recuperar el cuerpo de su padre. La confirmación de que el cadáver hallado en las costas de la isla de Córcega es el de José Celaya se produce a los seis meses de su desaparición. José Celaya fue arrastrado por la fuerza de las aguas en la confluencia de las rieras de Gavarra y de Buscarons, en Canet de Mar.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En