Incendiado el coche del candidato a sustituir al edil asesinado por ETA en Rentería

"Lo esperaba y lo tenía asumido". A Manuel Zamarreño, de 42 años, tercero en la lista del PP para el Ayuntamiento de Rentería y candidato a sustituir al concejal José Luis Caso, asesinado por ETA, le quemaron su coche en la madrugada de ayer. La destrucción del vehículo ha sido un paso más en las amenazas que ha venido padeciendo desde que el pasado día 12 declaró que por lealtad a su amigo tenía que perder el miedo. El ataque se produce mientras se han reforzado las medidas de protección en torno a los cargos del PP.

Zamarreño, padre de cuatro hijos y calderero en paro, ha sido den...

"Lo esperaba y lo tenía asumido". A Manuel Zamarreño, de 42 años, tercero en la lista del PP para el Ayuntamiento de Rentería y candidato a sustituir al concejal José Luis Caso, asesinado por ETA, le quemaron su coche en la madrugada de ayer. La destrucción del vehículo ha sido un paso más en las amenazas que ha venido padeciendo desde que el pasado día 12 declaró que por lealtad a su amigo tenía que perder el miedo. El ataque se produce mientras se han reforzado las medidas de protección en torno a los cargos del PP.

Zamarreño, padre de cuatro hijos y calderero en paro, ha sido denunciado por el grupo municipal de Herri Batasuna (HB) en Rentería como autor de un delito de calumnias por haber acusado a los cinco concejales de la formación independentista de haber actuado como "comando de información de ETA sobre José Luis Caso". Este fue asesinado el pasado día 11 de un tiro en la cabeza en un bar en Irún (Guipúzcoa).Un grupo de encapuchados destruyó en la madrugada de ayer el coche Seat Ibiza de Zamarreño cuando lo tenía estacionado en la calle de Basanoaga, cerca de su vivienda. Los autores del sabotaje, después de quemar el automóvil, destruyeron diverso mobiliario urbano.

El Ayuntamiento de Rentería condenó el ataque sufrido por este vecino del municipio, aunque reconoció que los autores de la acción "cumplieron, en parte, alguna amenaza" que ha aparecido en la localidad contra el candidato del PP, "destrozando su vehículo particular, una herramienta de trabajo para un obrero".

Política de tierra quemada

Todos los partidos representados en la corporación de Rentería, salvo HB dicen ser conscientes de que las condenas y los llamamientos a la cordura no sirven para "paralizar la estrategia de destrucción, de política de tierra quemada" que llevan a cabo los violentos. Y están convencidos de que los autores de ese tipo de acciones desconocen que con la palabra "se puede defender cualquier cosa" y que nada van a conseguir con la práctica de la violencia. A pesar de ello, el Ayuntamiento de Rentería pide a los violentos que cesen en sus acciones y les exige que acaben de una vez por todas.Manuel Zamarreño, que está dispuesto a ocupar la vacante dejada por José Luis Caso, se afilió al PP por su amistad con él, labrada a lo largo de 24 años de trabajar juntos. El Partido Popular en Guipúzcoa, que consiguió dos concejales en Rentería en las elecciones municipales de 1995, se reunirá el próximo enero para analizar la posible sustitución de José Luis Caso.

Algunos dirigentes populares no descartan que el puesto del edil asesinado por ETA quede vacante hasta las próximas elecciones, como ocurrió en el caso del presidente del PP en Guipúzcoa y concejal del Ayuntamiento de San Sebastián, Gregorio Ordóñez asesinado por ETA el 23 de enero de 1995.

Tras el asesinato de José Luis Caso, la dirección del PP convenció a sus militantes más reticentes de la conveniencia de que todos sus cargos públicos lleven escolta en Euskadi. ETA les ha elegido como objetivo principal de sus acciones terroristas y por ello el PP ha asignado protección a los 210 políticos populares del País Vasco para intentar evitar que la organización terrorista cumpla su amenaza. El coste anual de las medidas de protección para todos los electos es estimado por el PP en alrededor de 600 millones de pesetas.

Por otra parte, el grupo municipal de HB en Portugalete (Vizcaya) denunció la presencia de " personas armadas" en el salón de plenos del Ayuntamiento, en referencia a dos escoltas del PP que se encontraban en el edificio durante la sesión que se celebró ayer, informa Europa Press.

El concejal independentista Fernando Landaburu preguntó dos veces al alcalde, Mikel Cabieces, sobre la legalidad de que personas armadas permanecieran en la sala y dijo sentirse "personalmente intimidado". Landaburu añadió que el máximo responsable municipal no debería permitir que "gente armada" permanezca en el plenario, aparte de los policías municipales," que no entran, a no ser que se les llame".

Ante las preguntas del edil de HB, el alcalde se comprometió a consultar el asunto con el secretario de la corporación y a responder en el próximo pleno.