Albright confiesa que no encuentra el camino para reconstruir el proceso de paz en Oriente Proximo

"Luchar sin descanso contra el terrorismo, aunque requiera un trabajo de 24 horas al día". Este es el mensaje que la secretaria de Estado norteamericana, Madeleine Albright, transmitió al presidente de la Autoridad Palestina (AP), Yasir Arafat, en el transcurso del encuentro celebrado ayer por la mañana en la ciudad de Ramala, en Cisíjordania. La secretaria de Estado confesó su perplejidad ante las dificultades del proceso de paz. David Bar-lllan, portavoz de Benjamín Netanyahu, afirmó que los asentamientos no pueden congelarse "de la misma forma que no se puede congelar la vida"

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"Luchar sin descanso contra el terrorismo, aunque requiera un trabajo de 24 horas al día". Este es el mensaje que la secretaria de Estado norteamericana, Madeleine Albright, transmitió al presidente de la Autoridad Palestina (AP), Yasir Arafat, en el transcurso del encuentro celebrado ayer por la mañana en la ciudad de Ramala, en Cisíjordania. La secretaria de Estado confesó su perplejidad ante las dificultades del proceso de paz. David Bar-lllan, portavoz de Benjamín Netanyahu, afirmó que los asentamientos no pueden congelarse "de la misma forma que no se puede congelar la vida"

Un fuerte apretón de manos entre Yasir Arafat y Madeleine Albright a primera hora de la mañana fue el punto de partida de una larga conversación que duró cerca de tres horas, el mismo tiempo que la emisaria norteamericana había dedicado el día anterior a conversar con el primer ministro Benjamín Netanyahu y a tratar de comprender y conocer de cerca las razones de las autoridades israelíes para justificar el bloqueo y la congelación del proceso de paz en Oriente Próximo.Madeleine Albright llegó a Ramala en un helicóptero que previamente había sobrevolado los puestos de control israelíes que salpican Cisjordania y cuya clausura, decretada desde el pasado 30 de julio, tras el atentado a un mercado de Jerusalén y a una cafetería de la misma ciudad, estrangula la economia palestina y provoca unas pérdidas valoradas en cerca de seis millones de dólares diarios (900 millones de pesetas).

La visión desde el aire de la atormentada geografía de los territorios autónomos y la larga reflexión con Yasir Arafat provocaron en la secretaria de Estado norteamericana una frase de compasión y de aliento con la que trató de ganarse las simpatías de los palestinos -"Es comprensible la frustración del pueblo palestino, porque no disfruta aún de los beneficios de la paz"- y tranquilizar a esa población que en las últimas horas han venido acusando a Albright de "tomar partido" en favor de Israel y de defender unilateralmente los puntos de vista y las posiciones de Netanyahu.

La secretaria de Estado norteamericana, a pesar de todas estas concesiones formales y puntuales hacia los palestinos, volvió ayer, al igual que el día anterior a insistir con firmeza en la necesidad de acabar con el terrorismo y de combatirlo sin descanso durante todas las horas del día. Albright reclamó asimismo de Arafat que su policía, la palestina, colabore con las fuerzas de seguridad israelí de forma permanente en la lucha contra la violencia.

Madeleine Albright admitió sentirse perpleja ante el atolladero en el que se encuentra el proceso de paz y confesó con claridad que no había encontrado aún la manera de enderezar de nuevo las negociaciones y el diálogo. "Por el momento seguimos sin ver cuáles serían los mejores medios de volver a encarrilar el proceso de paz. Queda por recorrer un largo camino".

Mientras tanto, numerosos estudiantes se manifestaron ayer de nuevo en varias ciudades palestinas, quemando banderas estadounidenses y gritando "Albright, tienes que ser honrada no partidista".

Negociación con Siria

A pesar del pesimismo, la emisaria norteamericana intentará descongelar la situación, abriendo e impulsando unas negociaciones entre Siria e Israel, bajo los auspicios y la tutela de los Estados Unidos.

Benjamín Netanyahu parece estar ya de acuerdo en la reanudación de estos contactos. Esta actitud está compartida por las autoridades de Damasco, cuya prensa recogía ayer con "cierta esperanza", el compromiso de Estados Unidos en reactivar el proceso de paz, anunciando solemnemente que "Siria no dudará en conceder una oportunidad a todos los esfuerzos que persigan impulsar el proceso de paz de acuerdo con los principios sobre los que se lanzó".

Ayer por la tarde, Madeleine Albright volvió a reunirse con Benjamín Netanyahu, la segunda entrevista que mantiene con el primer ministro israelí en poco más de 24 horas. Antes de continuar su gira por Siria, Egipto, Jordania, Arabia Saudí y Líbano la emisaria de Estados Unidos ha anunciado que se entrevistará de nuevo con Yasir Arafat.