Lluis Pasqual entra en el flamenco con Antonio Canales

En apariencia, el drama La casa de Bernarda Alba, de Federico García Lorca, y el Guernica que pintó Pablo Picasso poco tienen en común. Sin embargo, al director de teatro Lluís Pasqual y al bailaor gitano Antonio Canales se les ha ocurrido juntar esas dos referencias de la cultura en un es pectáculo que se presentará en noviembre en el Festival de Otoño de Madrid. Los ensayos arrancarán el día 25, según dijo Pasqual en los cursos de verano de la Universidad Complutense.Canales y Pasqual han dividido la obra en dos partes, una trágica y otra plástica. La primera representa "la obr...

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En apariencia, el drama La casa de Bernarda Alba, de Federico García Lorca, y el Guernica que pintó Pablo Picasso poco tienen en común. Sin embargo, al director de teatro Lluís Pasqual y al bailaor gitano Antonio Canales se les ha ocurrido juntar esas dos referencias de la cultura en un es pectáculo que se presentará en noviembre en el Festival de Otoño de Madrid. Los ensayos arrancarán el día 25, según dijo Pasqual en los cursos de verano de la Universidad Complutense.Canales y Pasqual han dividido la obra en dos partes, una trágica y otra plástica. La primera representa "la obra clásica, la tragedia pura, que se respira en La casa de Bernarda Alba", explicó Pasqual. La segunda surge a raíz del "estallido de esa tragedia previa. Ese estallido es el Guernica", añadió. Este proyecto supone la primera incursión del director teatral en el flamenco. Sobre esta nueva experiencia se mostró prudente: "Es la primera vez que me meto en el mundo flamenco y aquí hay que ser cauteloso. El flamenco es como el cristal, se empaña sólo con tocarlo".

Pascual eligió a Lorca para su proyecto conjunto con Canales porque 11 es impresionante ver cómo un literato podía transitar por el sol y la luna, por el día y la noche. Lorca escribe al mismo tiempo la tragedia perfecta con La casa de Bernarda Alba y Comedia sin título,, que representa la destrucción absoluta del teatro", concluyó. Pasqual admira de Lorca "la elección de personajes, el personaje tierra, los personajes dramáticos, femeninos, de mujeres sin hombre, de novias sin novio, con los que expresa sus miedos, utopías y desilusiones".

Este tipo de personaje lorquiano se contrapone "al narrador, con el que él mismo [Lorca] se ofrece como materia para sacrificarse en el altar", añadió.

El proyecto surgió de manera espontánea, que es "la mejor manera de trabajar", según le parece a Pasqual. Éste se reunió con Canales "hace seis o siete meses en un hotel", según cuenta, en torno a una cuestión: "Si se puede o no bailar la palabra". De ese encuentro surgieron muchos temas, "entre ellos la representación conjunta de Bernarda Alba y el Guernica", explicó Pasqual. Al escuchar la posibilidad de representar el Guernica en boca de Canales, Pasqual mostró su asombro y hasta su incredulidad de que semejante idea fuera plasmable sobre un tablao. Pero el bailaor le disipó la duda de un manotazo: "Canales se levantó de la silla y con uno solo de sus gestos yo vi el caballo del Guernica", narró el director.

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