Los bancos suizos publican en periódicos de todo el mundo las cuentas de las víctimas del holocausto

La Asociación de Banqueros Suizos va a publicar a partir de hoy en los periódicos de 28 países lista de todas las cuentas durmientes abiertas por extranjeros con anterioridad a 1945, muchas de las cuales pudieron pertenecer a víctimas del holocausto. Según fuentes bancarias suizas, el monto total de los depósitos ronda los 60 millones de francos suizos (unos 6.000 millones de pesetas), una suma bastante superior a los 43 millones de francos que se reconocieron el año pasado.El anuncio, que entre otros diarios aparecerá en EL PAÍS, constituye la parte más visible de una campaña de inform...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La Asociación de Banqueros Suizos va a publicar a partir de hoy en los periódicos de 28 países lista de todas las cuentas durmientes abiertas por extranjeros con anterioridad a 1945, muchas de las cuales pudieron pertenecer a víctimas del holocausto. Según fuentes bancarias suizas, el monto total de los depósitos ronda los 60 millones de francos suizos (unos 6.000 millones de pesetas), una suma bastante superior a los 43 millones de francos que se reconocieron el año pasado.El anuncio, que entre otros diarios aparecerá en EL PAÍS, constituye la parte más visible de una campaña de información que hoy van a presentar en Zúrich Paul Volcker, ex presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, e Israel Singer, secretrio general del Congreso Judío Mundial. Con la ruptura de su tradicional secreto, la banca suiza intenta acallar las acusaciones del Congreso Judío Mundial respecto a la retención de fortunas en cuentas dejadas por las víctimas del holocausto. Los bancos niegan haberse apropiado de esos depósitos inactivos.

El texto, de varias páginas, invita a los titulares de cuentas o a sus herederos a presentar reclamaciones. Para ello, se facilitarán números de teléfono locales. Todo el proceso estará controlado por la auditora ATAG Ernst & Young. Los depósitos no reclamados serán entregados a organizaciones caritativas previa consulta a instituciones judías representativas.

Una segunda lista se publicará el próximo octubre con las cuentas inactivas anteriores a 1945 abiertas por residentes suizos, que pudieron actuar como intermediarios para esconder los haberes de judíos europeos y otras personas amenazadas por los nazis. Los bancos suizos consideran durmiente, o inactiva, una cuenta cuando en un periodo de 10 años no se producen movimientos. Esto significa que el listado puede incluir también a titulares que perdieron el contacto por otras razones distintas al holocausto.

Por otra parte, el Vaticano negó ayer que guardara 200 millones de francos suizos a los fascistas croatas tras la Segunda Guerra Mundial.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En