Los trabajadores de los teatros nacionales estudian ir a la huelga

El comité de empresa de los teatros nacionales (María Guerrero, Olimpia, Zarzuela y Compañía Nacional de Teatro Clásico) ha decidido no realizar desde ayer ninguna hora extra y estudiar la convocatoria de huelga indefinida que afectaría de inmediato a las representaciones de Eslavos, de Tony Kusnher, en el María Guerrero.El posible paro también afectaría a los estrenos previstos de El dúo de la Africana y El bateo, dos producciones del Teatro de la Zarzuela, cuyas representaciones está previsto que comiencen la próxima semana en Barcelona. E involucraría también a los estr...

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El comité de empresa de los teatros nacionales (María Guerrero, Olimpia, Zarzuela y Compañía Nacional de Teatro Clásico) ha decidido no realizar desde ayer ninguna hora extra y estudiar la convocatoria de huelga indefinida que afectaría de inmediato a las representaciones de Eslavos, de Tony Kusnher, en el María Guerrero.El posible paro también afectaría a los estrenos previstos de El dúo de la Africana y El bateo, dos producciones del Teatro de la Zarzuela, cuyas representaciones está previsto que comiencen la próxima semana en Barcelona. E involucraría también a los estrenos, en el Festival de Teatro Clásico de Almagro, de dos montajes de obras de nuestro teatro clásico: El anzuelo de Fenisa, de Lope de Vega y La venganza de Tamar, de Tirso de Molina.

Según los trabajadores, el hecho desencadenante del posible paro ha sido el comienzo de una serie sistemática de despidos, que se inició con el de siete trabajadores del Centro Dramático Nacional y que puede extenderse a otros 113 que reclaman situación de fijeza laboral, ya que alegan que su contrato fue elaborado en fraude de ley, y a 54 más que reclaman el reingreso por despido improcedente.

Miembros del comité de empresa de estos teatros, señalan que el motivo que aduce el Ministerio de Educación y Cultura para ejecutar estos primeros despidos ha sido precisamente la interposición de esas aludidas demandas por despido improcedente, que fueron realizadas al menos hace dos años.

Presión ilegal

"Esta medida de presión ilegal, como es despedir a un empleado por litigar contra la empresa, es un atentado contra el derecho de los trabajadores y por ello una medida anticonstitucional, a lo que hay que añadir que el coste de estos despidos sale del erario público, del dinero de los contribuyentes, incluido el de los propios despedidos", señalan miembros del comité de empresa.

Los trabajadores del CDN conocieron su despido a través de un fax enviado a su centro de trabajo y posteriormente por una carta firmada por Tomás Marco, director general del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM). Se da la circunstancia de que los siete trabajadores llevan más de cinco años trabajando en esta unidad de producción escénica y que uno de ellos se júbilaba este año.

Tomás Marco declaró ayer que no eran despidos lo que se comunicó a estos trabajadores, sino la finalización de su contrato: "Es imposible que estos trabajadores hubieran logrado la fijeza por sentencia. Nosotros nos limitamos a obedecer al Ministerio de Administraciones Públicas, que no autoriza esos contratos porque son ¡legales". Marco alega que lo que se está haciendo es reestructurar la plantilla "quitando contratos eventuales para convertirlos en fijos, y no mantener ese cachondeo contractual. Los trabajadores están en su derecho de ir a la huelga", concluyó, "pero por mi parte la cosa no tiene arreglo".

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