La última 'chica-Bond' rompe con su pasado de modelo para ser actriz

Famke Janssen cree que la mayoría de las modelos "no tienen base para actuar"

Muy a su pesar, el glamour de Famke Janssen es todavía más el de una top model que el de una actriz. Janssen, de 29 años, logró saltar en 1995 de la pasarela -lugar de trabajo que decía no soportar más- a, la gran pantalla. Los caza chica-Bond la eligieron entre miles de candidatas de todo el mundo para ser la guapa mala de Golden Eye, última entrega de la serie. Pero ahora, en Ajuste de cuentas (que se estrena el viernes en España) Janssen se quita el maquillaje de chica-Bond y pretende demostrar, interpretando a una sufrida madre de familia, otros valores, los de actriz.

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Muy a su pesar, el glamour de Famke Janssen es todavía más el de una top model que el de una actriz. Janssen, de 29 años, logró saltar en 1995 de la pasarela -lugar de trabajo que decía no soportar más- a, la gran pantalla. Los caza chica-Bond la eligieron entre miles de candidatas de todo el mundo para ser la guapa mala de Golden Eye, última entrega de la serie. Pero ahora, en Ajuste de cuentas (que se estrena el viernes en España) Janssen se quita el maquillaje de chica-Bond y pretende demostrar, interpretando a una sufrida madre de familia, otros valores, los de actriz.

Famke Janssen, vestida de colegiala (horquilla incluida) y perfectamente maquillada, es una gigantesca y elegante holandesa que reside en EE UU desde hace 11 años. Empezó su preparación como actriz matriculándose en 1991 en Literatura en la Universidad de Columbia. "La mayoría de las top models que quieren ser actrices no tienen ninguna base. La carrera de modelo es muy corta y por eso muchas sienten la tentación de saltar al cine como si fuera una continuación, natural, pero no es tan fácil, requiere una preparación sólida", señaló ayer la actriz en una conferencia de prensa en la que destiló cierto desdén hacia sus ex colegas. "Ser chica-Bond me ha abierto las puertas de Hollywood", añadió, "pero ahora me interesa encaminar mi carrera hacia papeles muy diferentes para que no me encasillen. Como actriz no me gusta repetirme".

Altman

Su última colaboración importante ha sido, 'según explicó, para la película de Robert Altman Gingerbreadman. "Lo mejor de Robert Altman es que te deja improvisar el personaje, no te dirige, no te dice qué tienes que hacer; simplemente te deja actuar. Y yo como actriz me siento mejor si improviso, si aporto algo al personaje".

En Ajuste de cuentas, dirigida por el inglés John Irvin, la actriz interviene junto a Harvey Keitel y Stephen Dorff. "Estar junto a tipos tan duros me hace sentirme muy femenina", afirma Famke Janssen. "Harvey es un actor que improvisa cada escena, se aprende mucho a su lado".

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