La Mesa del Congreso rechaza un acta tergiversada

La Mesa del Congreso rechazó y dejó sin aprobar ayer el acta de la reunión que había celebrado el pasado día 13. La práctica totalidad de sus nueve miembros entendió que no recogía, ni en el fondo ni en la forma, el debate sostenido sobre el amparo que el grupo socialista había pedido al presidente de la Cámara por las manifestaciones del diputado Jaime Ignacio del Burgro (PP) en torno a la comisión que investiga la supuesta amnistía fiscal de 200.000 millones de pesetas.El acta especificaba que el debate se produjo tras la interrupción de la Mesa para recibir al Príncipe de Marruecos c...

La Mesa del Congreso rechazó y dejó sin aprobar ayer el acta de la reunión que había celebrado el pasado día 13. La práctica totalidad de sus nueve miembros entendió que no recogía, ni en el fondo ni en la forma, el debate sostenido sobre el amparo que el grupo socialista había pedido al presidente de la Cámara por las manifestaciones del diputado Jaime Ignacio del Burgro (PP) en torno a la comisión que investiga la supuesta amnistía fiscal de 200.000 millones de pesetas.El acta especificaba que el debate se produjo tras la interrupción de la Mesa para recibir al Príncipe de Marruecos cuando había sido exactamente al revés, ya que la discusión se celebró antes de la llegada de Sidi Mohamed.

En cuanto al fondo, el acta aseguraba que la decisión final se había tomado con el voto en contra del vicepresidente primero, Enrique Fernández Miranda (PP); de la secretaria, María Bernarda Barrios, y del propio presidente, Federico Trillo. Fuentes de la Mesa aseguraron que la sorpresa de estos dos últimos fue mayúscula, ya que se tomó sobre una propuesta de consenso de Trillo.

El acuerdo consistió en transmitir a la comisión investigadora de los expedientes de Hacienda que debe atenerse al objeto para el que fue creada, concluir sus trabajos en el plazo previsto y no conculcar derechos fundamentales de los titulares de aquéllos.

En la reunión de ayer, Fernández Miranda sostuvo que él sí había votado en contra y se acordó rehacer de nuevo el acta para que así conste.

Es habitual que la Mesa apruebe actas de sus reuniones sugiriendo pequeñas modificaciones, pero las fuentes no recuerdan precedentes de que un acta haya quedado sin aprobar por disconformidad de sus miembros con el contenido.