El Defensor del Menor denuncia a una hormigonera autorizada junto a un colegio

El defensor del Menor, Javier Urra, ha denunciado ante la Fiscalía de Madrid, en una carta enviada el día 16, el funcionamiento de una planta dosificadora de áridos levantada a pocos metros del colegio Juan Zaragüeta (Hortaleza). Es una de las primeras actuaciones de Urra, cuyo cargo se creó hace cuatro meses. El centro escolar está rodeado por los cuatro costados: delante, a la puerta del centro, la M-40; detrás, la vía del tren, y a los lados, la hormigonera y un almacén donde cargan decenas de camiones al día.

Los padres de los 450 alumnos denunciaron el caso ante el Defensor del Pue...

El defensor del Menor, Javier Urra, ha denunciado ante la Fiscalía de Madrid, en una carta enviada el día 16, el funcionamiento de una planta dosificadora de áridos levantada a pocos metros del colegio Juan Zaragüeta (Hortaleza). Es una de las primeras actuaciones de Urra, cuyo cargo se creó hace cuatro meses. El centro escolar está rodeado por los cuatro costados: delante, a la puerta del centro, la M-40; detrás, la vía del tren, y a los lados, la hormigonera y un almacén donde cargan decenas de camiones al día.

Los padres de los 450 alumnos denunciaron el caso ante el Defensor del Pueblo la semana pasada. La concejala de distrito Carmen Rodríguez, del PP, afirma que la hormigonera cumple la ley. El fiscal de Medio Ambiente y Urbanismo, Emilio Valerio, ha asegurado que recurrirá la licencia de funcionamiento que el Ayuntamiento otorgó a la hormigonera."Este colegio es como una isla que en lugar de estar rodeada por agua lo está por mastodontes urbanísticos", explicó Cristina Contreras, presidenta de la. asociación de padres de alumnos (APA). "Al principio, el centro sólo tenía el tren a la espalda. El resto eran huertas", añadió.

El Defensor del Menor, Javier Urra, comentó que "además del impacto acústico y visual de la M-40 y de los trenes de mercancías, ahora los niños están sometidos a la contaminación que desprende la hormigonera". "No entiendo cómo el Ayuntamiento ha permitido que el colegio llegue a quedarse encerrado en una situación tan anómala", cuestionó Urra.

La concejal Rodríguez reconoció: "No me gusta demasiado el entorno del colegio. Por eso el Ayuntamiento busca un terreno nuevo donde trasladar la hormigonera". La planta dosificadora de áridos y cementos no reúne todos los requisitos legales, según Urra. "Incumple las medidas de seguridad [pantalla de tiras de goma y cortina de agua para tapar la salida de polvo, así como una barrera vegetal que rodee la fábrica y la aísle del exterior] dictadas por la Consejería de Medio Ambiente"*, explicó.

Por otra parte, la Consejería de Sanidad y Salud Pública recomendaba en un informe, en julio de 1996, fecha en la que comenzó la construcción de la hormigonera, la ubicación de las actividades molestas e insalubres ( ... ) "alejadas de instalaciones de uso público y de especial protección como los colegios" según Urra. Un informe posterior, del mes de septiembre, elaborado también por Sanidad, contradice al primero y califica a la hormigonera sólo como "molesta".

Para Urra, este segundo informe es impreciso: "La hormigonera es molesta e insalubre para los niños", denuncia. Rodríguez contesta que "sólo es molesta y cumple con la ley".

La planta dosificadora de áridos y cementos cuenta con un peligro añadido: el tráfico continuo de camiones (más de diez a la hora) que entran y salen para cargar hormigón. "Por ahora, no ha habido accidente alguno, pero ¿hay que esperar a que un niño sea atropellado para, hacer algo al respecto?", se pregunta Urra.