Tropas tanzanas obligan a centenares de miles de refugiados a volver a Ruanda
El Ejército de Tanzania se empleó ayer a fondo para bloquear el éxodo de más de 300.000 refugiados hutus ruandeses, que el jueves intentaron internarse en el interior de Tanzania para evitar la repatriación forzosa dictada por el Gobierno de Dar es Salam. Fuentes del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) indicaron que esperan que un gran número de refugiados atraviesen hoy la frontera entre Tanzania y Ruanda.
El Ejército tanzano no sólo ha cortado la marcha de los refugiados hacia el sur y el este del país, sino que ha aprovechado para obligar a los hutus ruandeses ...
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El Ejército de Tanzania se empleó ayer a fondo para bloquear el éxodo de más de 300.000 refugiados hutus ruandeses, que el jueves intentaron internarse en el interior de Tanzania para evitar la repatriación forzosa dictada por el Gobierno de Dar es Salam. Fuentes del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) indicaron que esperan que un gran número de refugiados atraviesen hoy la frontera entre Tanzania y Ruanda.
El Ejército tanzano no sólo ha cortado la marcha de los refugiados hacia el sur y el este del país, sino que ha aprovechado para obligar a los hutus ruandeses a que emprendan el regreso a casa. "No quieren que vuelvan a instalarse en los campos que dejaron", declaró un miembro de la ONU. Anteriormente, las autoridades tanzanas habían lanzado un ultimátum a los refugiados para que abandonaran los campos y regresaran a Ruanda antes de que terminara el año.
ACNUR aceptó en un primer momento sin demasiadas críticas la decisión, lo que le valió una, severa crítica de Amnistía Internacional, que le acusó de incumplir su mandato de velar por los refugiados. "La operación está ahora completamente en manos del Ejército tanzano", declaró Anne Willem Bijleveld, portavoz oficial de ACNUR, que cree que los 540.000 refugiados hutus que huyeron de Ruanda en 1994, ante la victoria del pro tutsi Frente Patriótico Ruandés, serán obligados a volver.
Llamamiento urgente
Mientras el Gobierno de Kenia decidió convocar para el lunes una cumbre sobre la región de los Grandes Lagos, Manos Unidas y otras organizaciones no gubernamentales hicieron ayer desde Madrid un llamamiento urgente en favor de una inmediata intervención internacional de ayuda para ayudar a los centenares de miles de refugiados ruandeses y desplazados zaireños que se encuentran en peligro de muerte en torno a Kisangani, la bloqueada capital de la región de Alto Zaire. En noviembre regresaron a Ruanda más de 600.000 refugiados en el este de Zaire. Para Manos Unidas, Cáritas y otras organizaciones es falso que ya "no hay refugiados en situación de angustia en Zaire".Sin embargo, Canadá anunció ayer su decisión de retirar sus efectivos de la nonata fuerza multinacional, aprobada el mes pasado para ayudar a los refugiados ruandeses en Zaire.