INFANCIA

Unicef denuncia el secuestro en dos años de 3.000 niños ugandeses

s de 3.000 niños y adolescentes han sido secuestrados en el norte de Uganda en los dos últimos años por combatientes del grupo fundamentalista cristiano Ejército del Señor, según Unicef.Estos combatientes entran en hogares, colegios y comunidades y se llevan por la fuerza a los pequeños. Las niñas son violadas por los soldados y ofrecidas en matrimonio como forma de pago. "Los menores no van ni al colegio y por la noche duermen fuera de casa por miedo a las redadas de estos rebeldes delirantes", dice la portavoz de Unicef, Marie Heuzé.

En Gulu, uno de los distritos más afectado...

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s de 3.000 niños y adolescentes han sido secuestrados en el norte de Uganda en los dos últimos años por combatientes del grupo fundamentalista cristiano Ejército del Señor, según Unicef.Estos combatientes entran en hogares, colegios y comunidades y se llevan por la fuerza a los pequeños. Las niñas son violadas por los soldados y ofrecidas en matrimonio como forma de pago. "Los menores no van ni al colegio y por la noche duermen fuera de casa por miedo a las redadas de estos rebeldes delirantes", dice la portavoz de Unicef, Marie Heuzé.

En Gulu, uno de los distritos más afectados, 179 de las 180 escuelas primarias han cerrado sus puertas y de los 45 centros de salud sólo 11 son operacionales. Incluso los servicios básicos más elementales están desapareciendo debido a la inseguridad y a los conflictos continuos.

Según Heuzé, a pesar de que había habido rumores sobre estos secuestros, que son seguidos de torturas y malos tratos, no había pruebas. Las familias, aterrorizadas, no lo denunciaban.

Unicef contabiliza al menos 3.000, aunque se piensa que puede haber muchos más.

Los rebeldes, activos sobre todo en Gulu, Kitgum y en los distritos del norte de Uganda, han reconocido recientemente la masacre deliberada y el secuestro de cientos de escolares.

Unicef ilustra su informe con el caso de David, de 12 años. "Uno de los más suaves de los que tenemos, porque la mayoría son espeluznantes", advierte la portavoz. David dice que cuando uno de los chicos intentaba escaparse fue detenido, "Nos dieron un palo a cada uno de nosotros y nos obligaron a apalearle hasta que murió. El comandante rebelde nos advirtió que si intentábamos marchamos los espíritus de los que habíamos matado nos seguirían y nos atacarían".

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