Entrevista:

"Madrid es una ciudad tanguera"

Hay pocos cantantes de tango profesionales, nacidos en Madrid, que hayan sido recibidos con los brazos abiertos en el mismísimo Buenos Aires, entonando los clásicos airados o melancólicos del arrabal. Y hay pocos cantantes de tango -por no decir solo uno-, surgidos al amparo de la dislocada movida madrileña y que además hayan persistido en el género con ahínco y pasión. Antonio Bartrina, con más pinta de rocanrolero que de tanguista repeinado con gomina, acaba de grabar el octavo elepé con su grupo Malevaje, donde rinde homenaje al Elvis del tango: Gardel. Lo titulan: ...

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Hay pocos cantantes de tango profesionales, nacidos en Madrid, que hayan sido recibidos con los brazos abiertos en el mismísimo Buenos Aires, entonando los clásicos airados o melancólicos del arrabal. Y hay pocos cantantes de tango -por no decir solo uno-, surgidos al amparo de la dislocada movida madrileña y que además hayan persistido en el género con ahínco y pasión. Antonio Bartrina, con más pinta de rocanrolero que de tanguista repeinado con gomina, acaba de grabar el octavo elepé con su grupo Malevaje, donde rinde homenaje al Elvis del tango: Gardel. Lo titulan: Con su permiso, don Carlos. Bartrina es, en realidad, fotógrafo, pero la vida lo llevó "a esto, sin mala idea".Pregunta. ¿Cuándo descubrió el tango?

Respuesta. Descubrí el tango casi cuando nací, era lo que escuchaban mi madre y mi abuelo. Mi abuelo iba mucho a la sala El Sol, que se llamaba entonces El Rincón del Tango. Entre los jóvenes de mi generación el tango era casi desconocido, raro, ahora se conoce más.

P. ¿Cómo surgió la idea de formar un grupo?

R. En la primavera del 83 nos metíamos hasta doce amigos en la parte de atrás de un 4L y yo cantaba tangos. Unos amigos abrieron un bar y empezamos a cantar, con la idea de hacer unos días. Llegó una discográfica y grabamos un disco. Ahí surgió Malevaje.

P. Era la época de la movida, los antros de la movida. ¿Cómo encajó el tango en todo eso?

R. Todo el mundo era muy receptivo. Era la época y la sensación de la libertad y la locura lo que nos movía, y aunque nosupieras hacer nada, querías hacer algo.

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P. Malevaje compone desde hace años sus propios tangos. ¿Este homenaje con motivo de los 60 años de la muerte de Gardel es una excepción?

R. Sí, lo es. Mandamos al maestro Larrea, en Argentina, los temas escogidos para hacer los arreglos, e invitamos a amigos al disco. Luis Eduardo Aute, Santiago Auserón, Joaquín Sabina, Raimundo Amador y Jorge Pardo, se unen a Malevaje en este álbum.

P. ¿Qúe es lo que le sigue atrayendo del tango?

R.. El mundo del tango ha sido siempre muy romántico y muy duro también. Las letras hablan de sentimientos al límite.

P. ¿Hay un Madrid arrabalero?

R. Yo crecí en Carabanchel alto, y creo que Madrid siempre ha sido una ciudad muy tanguera, sobre todo en las afueras. Pero también Barcelona, que es portuaria. Quizá los catalanes son mas serios y el argentino, el porteño, como el madrileño, es más dicharachero.

P. ¿Cómo ha sido recibido en sus visitas a Buenos Aires?

R. Muy bien, he llegado a cantar con El Polaco, Roberto Goyeneche, en el Café Homero, en Buenos Aires. La gente fue muy receptiva y hasta se sentían orgullosos de que alguien de fuera cante su música.

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