El Banco de la Nación revoca un contrato con IBM y le reclama 82 millones de dólares

Alegando incumplimientos y "vicios de ilegitimidad", el Banco de la Nación, principal banco estatal argentino, revocó el contrato de 250 millones de dólares suscrito con la multinacional IBM para informatizar sus 525 sucursales. Reclama también la devolución de los 82 millones de dólares abonados hasta ahora y una cantidad, no determinada, como indemnización. Las irregularidades y delitos descubiertos, en trampas por más de 37 millones de dólares, desencadenaron un escándalo de considerables proporcionales y 30 procesamientos. Cayó la dirección del banco, la de IBM-Argentina y deben prestar de...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Alegando incumplimientos y "vicios de ilegitimidad", el Banco de la Nación, principal banco estatal argentino, revocó el contrato de 250 millones de dólares suscrito con la multinacional IBM para informatizar sus 525 sucursales. Reclama también la devolución de los 82 millones de dólares abonados hasta ahora y una cantidad, no determinada, como indemnización. Las irregularidades y delitos descubiertos, en trampas por más de 37 millones de dólares, desencadenaron un escándalo de considerables proporcionales y 30 procesamientos. Cayó la dirección del banco, la de IBM-Argentina y deben prestar declaración judicial personas estrechamente vinculadas al poder político.El comunicado difundido por la actual presidencia de la entidad bancaria subraya que, una vez estudiados los informes técnicos y jurídicos del contrato, "se ha procedido a su revocación por los vicios de ilegitimidad e imposibilidad de cumplimiento de objeto, que excluyeron la voluntad de la administración". "Además", se agrega en una nota de seis líneas, "se constató el incumplimiento de contrato dentro del plazo previsto". Roque Macarrone, presidente del banco, No cuantificó el monto. IBM ha cobrado hasta ahora 82 millones de dólares más IVA.

Según fuentes bancarias surgen ahora dos situaciones: que IBM se avenga a discutir un nuevo contrato, y en este caso las partes negociarían si procede o no la devolución, o que la multinacional no acepte la revocación e interponga juicio contra el Estado, iniciativa no descartada por la empresa.

Archivado En