La flota arrastrera volvió al caladero marroquí tras dos meses de parada biológica

La flota arrastrera que opera en el caladero del norte de Marruecos, compuesta por unas 150 embarcaciones, reanudó ayer la actividad en esas aguas tras cumplir los dos meses de parada biológica previstos en el acuerdo pesquero suscrito entre la Unión Europea y Rabat el pasado noviembre. Según lo estipulado, el próximo 15 de marzo iniciará una parada de dos meses la flota de palangre. Tras las negociaciones para el acuerdo con Marruecos, que tendrá una duración de cuatro años, la Administración española mantuvo la esperanza de que Rabat no obligase a la parada biológica a una flota que había es...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La flota arrastrera que opera en el caladero del norte de Marruecos, compuesta por unas 150 embarcaciones, reanudó ayer la actividad en esas aguas tras cumplir los dos meses de parada biológica previstos en el acuerdo pesquero suscrito entre la Unión Europea y Rabat el pasado noviembre. Según lo estipulado, el próximo 15 de marzo iniciará una parada de dos meses la flota de palangre. Tras las negociaciones para el acuerdo con Marruecos, que tendrá una duración de cuatro años, la Administración española mantuvo la esperanza de que Rabat no obligase a la parada biológica a una flota que había estado amarrada entre abril y noviembre. Frente a estas pretensiones, Marruecos ofertó solamente la posibilidad de elegir los meses de parada biológica, pero sin rebajar la duración de la misma.Los armadores de la flota arrastrera optaron por cumplir estrictamente los términos del acuerdo, según el cual debían iniciar una parada de dos meses desde el mismo momento de la entrada en vigor del nuevo compromiso, el pasado uno de enero.

La Administración española aprobó la concesión de una ayuda a los pescadores en paro de 76.000 pesetas al mes, medida que también se aplicará en los próximos meses al resto de las flotas que se vean obligadas al amarre por las vedas.

En medios del sector- se aceptaban las exigencias de Marruecos en materia de vedas, aunque tanto los armadores como la propia Administración plantearon a Rabat que las vedas respondan a la situación real de los caladeros y no a una simple exigencia de Marruecos. En la misma línea, el presidente ole la Federación Andaluza de Asociaciones de Armadores, Pedro Maza, lamentó que, mientras los barcos españoles estuvieron amarrados, han faenado otros barcos en esos caladeros comercializando las capturas en mercados comunitarios y españoles.

Él ministro de Agricultura, Luis Atienza señaló en Málaga la posibilidad de que el desguace voluntario financiado por Bruselas cubra una parte importante de las exigencias de reducción de flota previstas en el acuerdo con Marruecos.

Archivado En