Un científico español critica en Nature las tesis del PP sobre política científica

El impulso a la normalización científica se estancó en 1990

Un triunfo del Partido Popular en las próximas elecciones generales podría suponer el fin de una etapa que ha sido especialmente fructífera para la ciencia española, aunque desde 1990 el crecimiento esté estancado. De esta forma se expresa Pere Puigdomènech, director del Centro de Investigación y Desarrollo del Consejo Superior de Investigaciones Cientificas (CSIC), en un artículo que publica esta semana la prestigiosa revista Nature.

El autor expresó a este periódico una "cierta preocupación", ante un posible Gobierno del PP, por el hecho de que las propuestas de este partido, para las...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Un triunfo del Partido Popular en las próximas elecciones generales podría suponer el fin de una etapa que ha sido especialmente fructífera para la ciencia española, aunque desde 1990 el crecimiento esté estancado. De esta forma se expresa Pere Puigdomènech, director del Centro de Investigación y Desarrollo del Consejo Superior de Investigaciones Cientificas (CSIC), en un artículo que publica esta semana la prestigiosa revista Nature.

El autor expresó a este periódico una "cierta preocupación", ante un posible Gobierno del PP, por el hecho de que las propuestas de este partido, para las que no rechaza el calificativo de ingenuas, adolecen de una reflexión más profunda" sobre cómo debe organizarse la ciencia en España y por qué el modelo iniciado con la llegada del PSOE al poder "no ha llegado a consolidarse".Ante la situación actual, "que no es ni mucho menos la óptima", la posición del Partido Popular "ha sorprendido y preocupado" a los investigadores (el PP propuso en las elecciones de 1993 suprimir el actual sistema de evaluación científica y redistribuir los fondos públicos entre universidades y centros públicos).

La alarma desatada entre los científicos ha provocado que el PP "reconsidere su postura", declara Puigdomènedh, y que haya iniciado una, ronda de consultas para adecuar mejor sus propuestas. "Probablemente", argumenta este científico al comentar su artículo y ante unas propuestas que considera poco acordes con lo que se hace en otros países, "en el PP se habían preocupado poco por analizar a fondo la cuestión".

Las mejoras introducidas por los Gobiernos del PSOE se traducen, dice. el autor en el artículo, en "indicadores objetivos" como las leyes de reforma universitaria y de la ciencia, la constitución de la Agencia Nacional de Evaluación o la puesta en marcha de los Planes Nacionales. A ello, añade el incremento presupuestario destinado a infraestructuras o personal.

Pequeño porcentaje del PIB

El fruto de esta labor ha permitido "doblar el número de artículos" en revistas internacionales, "signo inequívoco" del incremento de la cantidad y la calidad, de la producción científica. A pesar de las mejoras, Puigdomènech considera que la ciencia española aún, "no se ha normalizado" con respecto a los países de la Unión Europea. Una prueba de ello, afirma, es que el número de investigadores por habitante "continúa estando por debajo de la mitad de la media europea" (26 investigadores por cada 10.000 habitantes en España) y el porcentaje del PIB destinado a investigación "se mantiene lejos" del de los países de la UE (0,9% ,en España frente al 1,9% de la UE), "El sistema se basa en exceso en la labor de los becarios", asegura el director del CID. "El país no puede absorber a la mayoría de investigadores porque apenas hay plazas públicas disponibles y porque el sector industrial es demasiado pequeño". En 1994 había en España 5.000 becarios, de, los cuales tan solo el 28% se hallaban en la industria.

Archivado En