El PSOE pide en los pasillos la "comparecencia" de Aznar

La insistencia del Partido Popular y el resto de la oposición en que Felipe González comparezca en el pleno para explicar su entrevista con Jesús Santaella, defensor del coronel Perote, provocó ayer una pintoresca reacción en las filas socia.listas: varios diputados pidieron en los pasillos que, ya puestos, también comparezca José María Aznar para contar sus conver saciones con Ricardo García Damborenea, ex dirigente socialista inculpado en el caso GAL.

Como no tiene cabida en el reglamento, más que una solicitud parlamentaria es una pulla, algo parecido al "y tú más". La petición "...

La insistencia del Partido Popular y el resto de la oposición en que Felipe González comparezca en el pleno para explicar su entrevista con Jesús Santaella, defensor del coronel Perote, provocó ayer una pintoresca reacción en las filas socia.listas: varios diputados pidieron en los pasillos que, ya puestos, también comparezca José María Aznar para contar sus conver saciones con Ricardo García Damborenea, ex dirigente socialista inculpado en el caso GAL.

Como no tiene cabida en el reglamento, más que una solicitud parlamentaria es una pulla, algo parecido al "y tú más". La petición "para que [Aznar] explique sus conversaciones [con García Damborenea] a lo largo de los dos últimos años" estuvo en boca de varios diputados socialistas, encabezados por el extrerneño Francisco Fuentes, que pretendía demostrar que es un despropósito de similar calibre que pedir la comparecencia de González.

Ésta fue la reacción informal de muchos socialistas cuando supieron que la oposición iba a pedir por escrito la comparecencia del jefe del Ejecutivo. No cabe en el reglamento la posibilidad de forzar la presencia de un determinado miembro del Gabinete, ya que el Gobierno actúa colegiadamente y cualquiera de sus miembros representa al conjunto.

Algunos ministros compartían la opinión de los ocurrentes diputados y arremetieron contra José María Aznar y el líder de Izquierda Unida, Julio Anguita, por las acusaciones de "Falta de respeto al Parlamento" que ayer hicieron los portavoces de sus formaciones contra González. El ministro de Trabajo, José Antonio Griñán, afirmó que si estos dos dirigentes políticos tuvieran algún respeto por la Cámara "al menos, una sola vez" habrían formulado una pregunta al presidente del Gobierno en las sesiones de control de los miércoles.

Griñán y otros parlamentarios socialistas se preguntaron por qué Aznar nunca interpela a González en estas sesiones. Los dirigentes del PP reconocen ahora que su grupo no gana nada con estas comparecencias de González, ya que tiene muchas posibilidades de salir airoso, por lo que prefieren para su líder los debates largos y más preparados.

En el debate de ayer, el Gobierno salió de la Cámara con la idea de que el asunto queda zanjado, por lo que González no accederá a la petición de que se repita la función con él como protagonista.