El presidente del Club de Roma invita a "desacralizar" la sociedad de la información

"Hay que desacralizar la sociedad de la información, las telecomunicaciones, el multimedia, el ciberespacio, las autopistas de la información". Así se expresó ayer Ricardo Diez Hochleitner, presidente del Club de Roma, en la clausura del encuentro sobre Telecomunicaciones y Gobernabilidad celebrado en los cursos de la Universidad Complutense en El Escorial. En esta misma línea, aunque con distintas palabras, se había pronunciado previamente el catedrático de sociología, Salvador Giner.Para Díez Hochleitner el momento actual, caracterizado por ser el escenario de la mayor revoluci...

"Hay que desacralizar la sociedad de la información, las telecomunicaciones, el multimedia, el ciberespacio, las autopistas de la información". Así se expresó ayer Ricardo Diez Hochleitner, presidente del Club de Roma, en la clausura del encuentro sobre Telecomunicaciones y Gobernabilidad celebrado en los cursos de la Universidad Complutense en El Escorial. En esta misma línea, aunque con distintas palabras, se había pronunciado previamente el catedrático de sociología, Salvador Giner.Para Díez Hochleitner el momento actual, caracterizado por ser el escenario de la mayor revolución a la que haya tenido que hacer frente el hombre, es delicado y desconcertante tanto por la amenaza latente de una grave recesión económica mundial, como por la desigualdad tecnológica y el carácter inamistoso de las tecnologías. "En este contexto la gobernabilidad se hace cada vez más difícil y, por si fuera poco, los gobiernos se aferran a prácticas ya periclitadas".

Esta visión escéptica se compensa con aspectos positivos indudables de las nuevas tecnologías, como son la garantía de participación ciudadana, la superación de los chauvinismos y la aportación de una visión globalizadora. Por todo ello, el presidente del Club de Roma afirma que ya ha nacido el futuro, un futuro marcado por la información y por el conocimiento. "Lo que pasa es que ahora nos toca estar alerta. No existen límites al multimedia mientras sea un factor dominado en vez de dominante".

En esta misma dirección se pronunció Salvador Giner. "Las telecomunicaciones son esencialmente ambivalentes; gracias a ellas los aparatos de los Estados democráticos y avanzados no se han colapsado y sirven, además, para fortalecer las relaciones sociales. Pero en otros casos socavan y destruyen esas relaciones y consolidan el abismo entre unos países y otros".

José Manuel Morán, presidente de Fundesco y director del encuentro, resumió de la siguiente forma el mensaje que se desprendía de las distintas posiciones expresadas a lo largo del curso: "Da la impresión de que el ciudadano se encuentra acosado por las telecomunicaciones".