España prepara gestos llamativos hacia EE UU y Asia en su presidencia europea

Consciente de su reputación de defensora de los intereses de Latinoamérica y del Magreb, la diplomacia española proyecta tomar durante su presidencia de la Unión Europea, en el segundo semestre de este año, iniciativas llamativas dirigidas hacia Estados Unidos y Canadá, por un lado, y Extremo Oriente, por otro, en materia de libre comercio y cooperación económica, según indican fuentes de la Administración.

La etapa española al frente de los Quince prevé ya la celebración, el próximo mes de noviembre, en Barcelona, de una gran conferencia ministerial del Mediterráneo, inspirada e...

Consciente de su reputación de defensora de los intereses de Latinoamérica y del Magreb, la diplomacia española proyecta tomar durante su presidencia de la Unión Europea, en el segundo semestre de este año, iniciativas llamativas dirigidas hacia Estados Unidos y Canadá, por un lado, y Extremo Oriente, por otro, en materia de libre comercio y cooperación económica, según indican fuentes de la Administración.

La etapa española al frente de los Quince prevé ya la celebración, el próximo mes de noviembre, en Barcelona, de una gran conferencia ministerial del Mediterráneo, inspirada en la Conferencia sobre Seguridad y Cooperación en Europa (CSCE), para impulsar la cooperación con el norte de Africa. Si las negociaciones marchan a buen, ritmo, también figura en su agenda la firma de sendos acuerdos de libre comercio con México y Mercosur, el mercado común formado por Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay. La rúbrica de este acuerdo podría hacerse en el marco de una cumbre. Deseosa de dar una imagen más equilibrada de su política exterior, la diplomacia española baraja ahora proponer una actualización de la Declaración Trasatlántica de 1990, que sienta las bases de las relaciones políticas y comerciales entre la UE y Estados Unidos, incluyendo en ella a Canadá.

La nueva declaración podría lanzar el objetivo, formulado por el primer ministro canadiense,. J. L. Chrétien, de crear entre norteamericanos y europeos una zona de libre comercio o incluso un espacio económico común con su consiguiente armonización de normas técnicas. En su discurso ante la Eurocámara, el nuevo presidente de la Comisión Europea, Jacques Santer, abundó la semana pasada en el mismo Sentido, al sugerir sustituir la declaración por un gran tratado transatlántico.

El Ministerio de Comercio español está llevando a cabo los primeros estudios técnicos. Si tiene su lógica que los dos primeros socios comerciales del mundo, EE UU y la UE, procedan a tal, acercamiento, la proteccionista Política: Agrícola Común (PAC) de los europeos constituye un serio obstáculo para alcanzar tal objetivo. No en balde, Washington revindica siempre la reducción de los subsidios agrícolas, comunitarios.

"En el mejor de los casos, la presidencia española se limitaría, junto con sus socios, a expresar la idea, pero ni siquiera la negociación empezaría este año", afirma un alto cargo de Asuntos Exteriores. "Sólo pondríamos la primera piedra", añade. añade...

Cumbre con ASEAN

Con Asia, la presidencia española parece dispuesta a recoger un deseo manifestado el pasado 13 de octubre por el primer ministro de Singapur, Goh Chok Tong, en nombre de la ASEAN, la asociación económica del sureste asiático que agrupa a Indonesia, Brunei, Malasia, Filipinas, Singapur, Tailandia y, dentro de poco, a Vietnam.

Goh Chok Tong propuso entonces celebrar, por primera vez, una cumbre entre la ASEAN y la UE, en la que podría participar China, a finales de diciembre de este año en Singapur. Para defender su idea no le faltan argumentos. En 1994, Asia absorbió la quinta parte de las exportaciones europeas -el triple que en 1980- y el 25% de las importaciones de la Unión proceden también de ese continente en plena expansión económica.

Tal petición plantea un doble reto a la presidencia española: Encontrar fechas aceptables para sus socios europeos justo después de la cumbre de Madrid, prevista para los días 15 y 16 de diciembre, y contar, además, con fuerzas para preparar una reunión que, por e lado comunitario, presidiría el jefe del Gobierno español. El propio Felipe González se ha preguntado si no sería preferible dejar para Italia, que sucederá a España al frente de la UE, la cita con la ASEAN.

El Ministerio de Asuntos Exteriores y uno de los comisarios españoles en Bruselas, Manuel Marín, han sido siempre acusados de privilegiar en la UE a Latinoamérica en detrimento de Asia. De ahí que, en el entorno de González, se considere útil para la imagen de la diplomacia española celebrar la cumbre con los asiáticos durante la presidencia española.,