PSOE y PP engrosan la deuda de la Comunidad y el Ayuntamiento en 100.000 millones

El socialista Joaquín Leguina y José María Álvarez del Manzano, del PP, se juegan su futuro político en Madrid en las elecciones de mayo. Todo indica que ambos pelearán por repetir en sus cargos. Mientras las urnas deciden, ellos aprobaron los presupuestos de las instituciones que presiden para 1995, aunque ignoran si podrán ejecutarlos. Unos presupuestos que reflejan dos filosofías distintas que coinciden, a la larga, en sobrecargar sus cuentas recurriendo a nuevas deudas. El Ayuntamiento, exprimido tras varios años de inversiones electoralistas, optó por contener simbólicamente sus gastos co...

El socialista Joaquín Leguina y José María Álvarez del Manzano, del PP, se juegan su futuro político en Madrid en las elecciones de mayo. Todo indica que ambos pelearán por repetir en sus cargos. Mientras las urnas deciden, ellos aprobaron los presupuestos de las instituciones que presiden para 1995, aunque ignoran si podrán ejecutarlos. Unos presupuestos que reflejan dos filosofías distintas que coinciden, a la larga, en sobrecargar sus cuentas recurriendo a nuevas deudas. El Ayuntamiento, exprimido tras varios años de inversiones electoralistas, optó por contener simbólicamente sus gastos corrientes. A la Comunidad le preocuparon más las inversiones que aplazar el pago de lo que ya debe.

El presidente desde hace 12 años de la Comunidad, Joaquín Leguina, ha previsto solicitar 65.000 millones de pesetas a los bancos (el 12,82% de su presupuesto regional), mientras el alcalde de Madrid de estos últimos cuatro años, José María Álvarez del Manzano, se endeudará en 47.000 millones (el 14,8%). Ambos recurrirán a los préstamos pese a que el Estado ya llena sus arcas públicas de manera generosa. Las dos instituciones gastarán 830.000 millones en 1994: 510.000 millones la Comunidad y 320.000 el Ayuntamiento.Mientras que los socialistas de la Comunidad, con el empujón de Izquierda Unida, suben año tras año sus gastos; los populares imponen su mayoría absoluta para rebajar este capítulo en el Ayuntamiento. Leguina gastará en 1995 un 5% más que en 1994, mientras que Álvarez del Manzano reducirá sus gastos un 4%, pese a que el Estado le ha dado un 10% más de dinero que en 1994.

El Ayuntamiento recibirá este año 95.300 millones de pesetas de la Administración central, lo que supone el 29,91% de los ingresos totales previstos por la capital. Por su parte, Leguina ingresará del Estado 165.838 millones de pesetas, un 30,19% del presupuesto regional.

El titular de la Hacienda municipal, Fernando López Amor, asegura que la Comunidad tardará más tiempo en pagar sus deudas porque dedica mucho menos dinero que el Ayuntamiento a amortizar el capital de los préstamos que ha solicitado. "Pagamos menos intereses por el capital recibido y acabaremos de saldar nuestras deudas en el 2002, mientras que la Comunidad acabará en el 2050", augura el edil conservador.

¿Cuánto ha dicho que debe?

Según la oposición regional (PP), el Gobierno de Leguina debe 310.000 millones de pesetas. Según la oposición municipal (IU y PSOE), las deudas del Ayuntamiento superan los 220.000 millones. Es decir, en total, las dos administraciones madrileñas deben más de 530.000 millones de pesetas. Conocer con rigor cuál es la morosidad real de las dos instituciones es complicado. Las cifras que manejan los cargos públicos contrastan con las que revela la oposición. El consejero de Hacienda, Ramón Espinar, mantiene que la deuda total de la Comunidad está en 301.000 millones, en definitiva 59.194 pesetas por madrileño. López Amor coloca la de la capital en 180.000 millones, unas 53.000 pesetas por ciudadano.

En personal, el PP municipal se gasta 37 de cada 100 pesetas, mientras que el PSOE dedica menos en la Comunidad, 30 de cada 100. "Reconozco que este Ayuntamiento tiene una estructura de personal muy pesada", dice López Amor, que ha tenido que dirigir 118.171 millones de pesetas de su presupuesto a las nóminas de los funcionarios.

Ramón Espinar se ha formado una opinión cautelosa sobre los presupuestos redactados por su compañero de Hacienda en el Ayuntamiento, pero apunta: "Choca, a igualdad fiscal, el decremento real en los capítulos de inversión. No es lo mejor, desde luego, que las inversiones bajen un 34,8%. En la Comunidad suben los gastos corrientes el 10,8% y la inversión sube también un 4,08%". Espinar se atrevió a comentar aspectos negativos del presupuesto municipal: "El capítulo dedicado a medio ambiente decrece en el Ayuntamiento un 4,8%, y la Comunidad lo sube en casi el 40%; y que el dinero para circulación disminuya un 15%.es un dato malo si tenemos en cuenta lo mal que se circula por la ciudad".