La polémica del pago a confidentes

El sargento Alfonso Morcillo presenció esporádicamente el pago a confidentes de la Guardia Municipal con fondos del Ayuntamiento de San Sebastián, según la denuncia presentada ante la Ertzaintza (policía autónoma) por uno de estos delatores, Eusebio Folgueira. Así lo publicó hace un mes un diario.

La polémica sobre los pagos a soplones planeó ayer en las manifestaciones de dos de los personajes políticos implicados en la disputa: el alcalde, Odón Elorza, y el teniente de alcalde Gregorio Ordóñez.

El socialista Elorza calificó de "rastreros" los ataques verbales sufridos por v...

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El sargento Alfonso Morcillo presenció esporádicamente el pago a confidentes de la Guardia Municipal con fondos del Ayuntamiento de San Sebastián, según la denuncia presentada ante la Ertzaintza (policía autónoma) por uno de estos delatores, Eusebio Folgueira. Así lo publicó hace un mes un diario.

La polémica sobre los pagos a soplones planeó ayer en las manifestaciones de dos de los personajes políticos implicados en la disputa: el alcalde, Odón Elorza, y el teniente de alcalde Gregorio Ordóñez.

El socialista Elorza calificó de "rastreros" los ataques verbales sufridos por varios agentes de ese cuerpo. Para él, el PP "se dedica a instrumentalizar lo que puede y no para en detalles". El gobierno municipal de San Sebastián está formado por el PSE, el Partido Popular y el PNV.

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Ordóñez, portavoz del PP vasco, había acusado al jefe de la Guardia Municipal, Gotzon Santamaría, y a otro de los agentes de efectuar pagos irregulares a confidentes y extendió la acusación al alcalde.

La denuncia pública se convirtió en querella, que fue desestimada por falta de fundamento. Ordóñez negó ayer cualquier vinculación entre el asesinato de Morcillo y las denuncias por él realizadas, y afirmó que el responsable de esa muerte podría ser "un chivato de ETA infiltrado en la Guardia Municipal". Elorza pronunció una lacónica frase en alusión a esa polémica: "Entre todos lo hemos matado" [a Morcillo]. Con ello quería decir, según explicó, que "se ha puesto en candelero a la Guardia Municipal y todos los que han intervenido son culpables".

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Dos guardias urbanos de San Sebastián fueron detenidos hace dos años por su presunta vinculación con ETA. Uno de ellos, Patxi Añorga, sigue encarcelado.

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