Cuba y EE UU reanudarán las conversaciones sobre migración
Cuba y Estados Unidos celebrarán, a partir del próximo día 24, una nueva ronda de conversaciones para dar seguimiento al acuerdo migratorio suscrito por ambos Gobiernos el mes pasado en Nueva York. La reunión tendrá lugar en La Habana y la delegación cubana llevará una "agenda abierta", no circunscrita sólo a temas migratorios, informó el portavoz de la Cancillería cubana, Miguel Alfonso. "Yo no sé hasta qué punto Estados Unidos seguirá insistiendo en que se hable únicamente de asuntos migratorios", dijo Alfonso durante una rueda de prensa celebrada ayer en La Habana.
El acuerdo mig...
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Cuba y Estados Unidos celebrarán, a partir del próximo día 24, una nueva ronda de conversaciones para dar seguimiento al acuerdo migratorio suscrito por ambos Gobiernos el mes pasado en Nueva York. La reunión tendrá lugar en La Habana y la delegación cubana llevará una "agenda abierta", no circunscrita sólo a temas migratorios, informó el portavoz de la Cancillería cubana, Miguel Alfonso. "Yo no sé hasta qué punto Estados Unidos seguirá insistiendo en que se hable únicamente de asuntos migratorios", dijo Alfonso durante una rueda de prensa celebrada ayer en La Habana.
El acuerdo migratorio firmado el pasado 9 de septiembre en Nueva York establecía que Cuba "se comprometía" a detener el éxodo de balseros hacia las costas de Florida, y a cambio EE UU concedería un mínimo de 20.000 visados de emigrante al año a ciudadanos cubanos, además de los que se otorgan a parientes inmediatos de ciudadanos norteamericanos y aquellos casos que, pese a estar aprobados desde hace años, se encuentran en lista de espera.
Alfonso recordó que Cuba había cumplido su parte del acuerdo al anunciar que impediría las salidas ilegales y que utilizaría la fuerza si fuese necesario, medida que en sólo cuatro días detuvo el éxodo de balseros y puso fin a la "crisis de las balsas". El portavoz reconoció que Estados Unidos, en cambio, todavía no ha comenzado a procesar los miles de visados prometidos, pero achacó el retraso a "problemas objetivos" como la falta de personal adicional y otras dificultades como la "adaptación de su legislación" a los nuevos acuerdos. Agregó que en la nueva ronda se tratará la situación y el futuro de los 35.000 cubanos que se hallan confinados en las bases norteamericanas de Guantánamo y Panamá.