Mitterrand considera injusto estrangular a Cuba y tacha el embargo de "primitivo"

AFP / J. M. CALVO / M. VICENT François Mitterrand, presidente de Francia, intervino ayer colateralmente en la crisis que enfrenta a Estados Unidos y Cuba en el curso de una reunión celebrada en París con 200 embajadores franceses para revisar las líneas maestras de la diplomacia de su país. "El embargo contra Cuba es absolutamente chocante", dijo Mitterrand; "considero injusto el método consistente en bloquear a otro país. Los americanos han estrangulado a Cuba y esto me parece una conducta completamente primítiva porque hace que las desgracias se acumulen".

Representantes de los Gobier...

AFP / J. M. CALVO / M. VICENT François Mitterrand, presidente de Francia, intervino ayer colateralmente en la crisis que enfrenta a Estados Unidos y Cuba en el curso de una reunión celebrada en París con 200 embajadores franceses para revisar las líneas maestras de la diplomacia de su país. "El embargo contra Cuba es absolutamente chocante", dijo Mitterrand; "considero injusto el método consistente en bloquear a otro país. Los americanos han estrangulado a Cuba y esto me parece una conducta completamente primítiva porque hace que las desgracias se acumulen".

Representantes de los Gobiernos de Estados Unidos y de Cuba se reúnen hoy en Nueva York movidos por un mismo sentimiento de urgencia -frenar la oleada de refugiados- pero con objetivos distintos. Para Washington, se trata de estimular la emigración legal, segura y ordenada, y detener la emigración ¡legal y arriesgada", según un alto funcionario. El régimen cubano, que ha enviado a Nueva York a una delegación de mayor peso político que la de Estados Unidos, aprovechará todas las oportunidades posibles para ampliar el contenido de las conversaciones. Cuba quiere aprovechar esta ronda de conversaciones para transmitir la sensación de que las negociaciones directas entre los dos Gobiernos constituyen la única manera de solucionar los conflictos. En abierta contradicción con el propósito expresado por el presidente Bill Clinton y varios responsables de su Administración hace apenas 10 días, el Gobierno cubano ha conseguido, por lo pronto, dictar las normas de inmigración de EE UU, que pondrá hoy encima de la mesa un ofrecimiento para ampliar hasta 20.000 el número de permisos de entrada a los cubanos que quieran emigrar, a cambio de que La Habana intervenga en la interrupción del flujo de balseros. Esta cifra coincide precisamente con la que manejan las autoridades cubanas, que consideran que EE UU no ha cumplido los Acuerdos Migratorios de 1984, según los cuales EE UU puede conceder hasta 20.000 visados de inmigrante al año, además de 3.000 a expresos políticos y sus familiares. Cuba afirma, por ejemplo, que en 1993 de los más de 5.100 cubanos que emigraron a EE UU, sólo 964 entraron con visados de inmigrante obtenidos en la sección de Intereses de EE UU en La Habana, por lo que lo primero que exigirá es que se apliquen los Acuerdos de 1984.El Gobierno de La Habana recalca además que la cifra total de emigrantes anuales, incluyendo a los balseros y a los que se quedan en EE UU para una visita "temporal", es equi valente a la del periodo ante rior a 1984, cuando no existía acuerdo migratorio alguno. La Habana también critica el he cho de que la Ley Migratoria estadounidense se aplica al caso de Cuba con criterios más estrictos que hacia la mayoría de los países -no se suele otorgar visado, dice, a herma nos cubanos de ciudadanos norteamericanos, ni a profesionales o a personas contra bajo garantizado en EE UU-. Por ello, opinan algunos norteamericanos. Otros dos países todavía no han tomado una decisión final. Argentina y el Reino Unido han comprometido también su cooperación militar.

Mientras tanto, el buen tiempo, después de las tormen tas del fin de semana, ha hecho subir de nuevo el número de rescatados, que el martes as cendió a 1.582, cinco veces más que el lunes. El escepticismo sobre las conversacion es de Nueva York -la rapidez de los eventuales acuerdos para ampliar cupos de emigración legal y la posibilidad de acogerse a los requisitos exigidos-juegan también a favor de la continuación del éxodo.

Para el cubano que no tenga familiares en EE UU y que no pueda justificar mínimamente una persecución política, la base de Guantánamo sigue siendo un objetivo atractivo. Más de 19.000 cubanos han abandonado la isla entre el 1 y el 31 de agosto, y los alója dos en Guantánamo tienen ya la posibilidad de ser traslada dos a dos países, Panamá y Honduras, que han dado el visto bueno para la acogida temporal de hasta 15.000 refugiados.