La OTAN reitera que sigue vigente la amenaza de un bombardeo

El Consejo Atlántico, que reúne a los representantes de los 16 países miembros de la Alianza, recordó ayer que sigue vigente la amenaza de ataques aéreos dentro de un perímetro de 20 kilómetros alrededor de Sarajevo. El máximo organismo de la OTAN, en su reunión semanal habitual, expresó su satisfacción por el éxito del ultimátum, aunque se manifestó vigilante y dispuesto a seguir la presión hasta que se levante por completo el cerco sobre la capital de Bosnia. El Consejo se mostró también satisfecho por la nueva actitud de Rusia ante el conflicto.La nueva dinámica.. de paz debe ser aprovechad...

El Consejo Atlántico, que reúne a los representantes de los 16 países miembros de la Alianza, recordó ayer que sigue vigente la amenaza de ataques aéreos dentro de un perímetro de 20 kilómetros alrededor de Sarajevo. El máximo organismo de la OTAN, en su reunión semanal habitual, expresó su satisfacción por el éxito del ultimátum, aunque se manifestó vigilante y dispuesto a seguir la presión hasta que se levante por completo el cerco sobre la capital de Bosnia. El Consejo se mostró también satisfecho por la nueva actitud de Rusia ante el conflicto.La nueva dinámica.. de paz debe ser aprovechada para reactivar la negociación del plan de paz y extender a otras zonas el alto el fuego y la mejora de suministro de ayuda humanitaria, según la mayor parte de los 16 embajadores ante la Alianza, en coincidencia con las discusiones mantenidas en Bonn por diplomáticos aliados y rusos el pasado martes. Toda la capacidad operacional de la Alianza Atlántica seguirá a disposición de Naciones Unidas para apoyar esta nueva dinámica, según subrayaron fuentes de la Alianza.

El Consejo Atlántico analizó los informes sobre el incidente de Vares, en el que cinco cascos azules fueron heridos por una granada de origen incierto, lo que dio lugar a que aviones de la OTAN realizaran vuelos rasantes en búsqueda de los responsables. Fuentes de la Alianza aseguraron que se estuvo "a un tris" del primer bombardeo aliado, pero en este caso debido a la aplicación del apoyo aéreo de proximidad a la Uríprofor.

El lanzamiento de un ataque debía producirse tras consultar al enviado de la ONU, Yasushi Akashi, según fuentes atlánticas, que aseguraron que el incidente se hubiera podido producir igualmente sin las decisiones del 9 de febrero sobre el levantamiento del cerco de Sarajevo.

El Consejo expresó su optimismo, después de lo que consideró como éxito aliado en Sarajevo, pero no dio por levantado aún el cerco, cosa que sólo sucederá cuando se restablezca la vida normal, la circulación de personas, el suministro de energía y el de alimentos. Mientras tanto, la amenaza que pesa sobre la artillería no controlada que se introduzca en el perímetro de 20 kilómetros sigue en pie.

La apertura del aeropuerto de Tuzla no fue objeto de ninguna referencia ni discusión especial por parte del Consejo. No hubo debate alguno sobre la posibilidad de aplicar el método Sarajevo, con una amenaza de ataques aéreos y una fecha de ultimátum, ni conminación a las fuerzas serbias para que abran el aeropuerto. Fuentes de la OTAN aseguraron que es la ONU la que debe tomar la iniciativa y que no se puede excluir que la Alianza lance una iniciativa similar a la de Sarajevo si lo pide la Unprofor.