Alfonso XII, Franco y Tierno Galván

San Francisco el Grande se convirtió en basílica en el año 1963. Pero desde muchos años antes era el templo de los grandes acontecimientos religiosos. En ella se celebraron grandes bautizos, comuniones, bodas y funerales. Allí se entonaron los solemnes cánticos de tedéum por Alfonso XIII y Franco. En 1885, la iglesia acogía los funerales del rey Alfonso XII, y casi un siglo más tarde, ya entre andamios, allí se celebraron los del alcalde de Madrid Enrique Tierno Galván.

Esta iglesia, acostumbrada a arreglos florales y trajes negros o blancos de lujo, sólo contaba ayer con un hombre ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

San Francisco el Grande se convirtió en basílica en el año 1963. Pero desde muchos años antes era el templo de los grandes acontecimientos religiosos. En ella se celebraron grandes bautizos, comuniones, bodas y funerales. Allí se entonaron los solemnes cánticos de tedéum por Alfonso XIII y Franco. En 1885, la iglesia acogía los funerales del rey Alfonso XII, y casi un siglo más tarde, ya entre andamios, allí se celebraron los del alcalde de Madrid Enrique Tierno Galván.

Esta iglesia, acostumbrada a arreglos florales y trajes negros o blancos de lujo, sólo contaba ayer con un hombre mayor que rezaba de rodillas.

"Antes la gente de postín no se casaba en los Jerónimos, sino aquí. Era la gran iglesia de Madrid", recuerda un viejo madrileño. Entonces también tenía más clientela el quiosco situado a la entrada del templo. Allí, una señora custodia rosarios, biblias, postales del Sagrado Corazón de Jesús en relieve y de mujeres vestidas de flamenca, viejas reliquias que los más modernos adoran. "Aún se celebran funerales y bautizos, aunque una boda... queda demasiado deslucida", comenta el guía-portero.

Más información
Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Sobre la firma

Archivado En