Oros y bastos para Beethoven
Esta semana, en la ONE pintaron oros que se tomaron bastos en la Filarmónica de Varsovia. Oros de muchos quilates fueron las versiones dadas por María Orán de los lieder Opus 8, de Schönberg, expresados con ese dominio, belleza vocal e intensa comunicatividad de nuestra soprano. No menor brillo alcanzó la Séptima sinfonía beethoveniana en manos de Aldo Ceccato al frente de una Nacional entregada y competente en grado surno. El maestro italiano entiende bien el sinfonismo de Beethoven y excelentemente el impulso avasallador, la obstinación rítmica y la unidad global que campean en...
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Esta semana, en la ONE pintaron oros que se tomaron bastos en la Filarmónica de Varsovia. Oros de muchos quilates fueron las versiones dadas por María Orán de los lieder Opus 8, de Schönberg, expresados con ese dominio, belleza vocal e intensa comunicatividad de nuestra soprano. No menor brillo alcanzó la Séptima sinfonía beethoveniana en manos de Aldo Ceccato al frente de una Nacional entregada y competente en grado surno. El maestro italiano entiende bien el sinfonismo de Beethoven y excelentemente el impulso avasallador, la obstinación rítmica y la unidad global que campean en la Sinfonía en la. El éxito tuvo matices de excepción.El símbolo de los bastos dominó la situación en el caso de la Filarmónica de Varsovia, una buena orquesta, dirigida por Kazimierz Kord (Silesia, 1930). El maestro hizo del "milagro" que es la Pastoral, una suerte de contabilidad fría, métrica y burocrática de lo escrito por Beethoven. Impávido hasta la desesperación y el tedio, Kord introdujo una nueva manera de hacer la música beethoveniana: el pasotismo.
Orquesta Nacional y Filarmónica de Varsovia
Solistas: M. Orán, soprano, y R. Castro, pianista. Obras de Chopin, Beethoven, Webem y Schönberg. Auditorio. Madrid. 21 y 22 de mayo.
Tampoco encandiló a la audiencia el pianista brasileiro Ricardo Castro, repetidas veces galardonado, pues si su técnica mecánica es considerable, su pensamiento musical se mostró bastante pobre. Aburrir a la "clientela" con el Concierto en fa menor de Chopin, es mérito que debe reconocerse al artista invitado.