Crítica:CLÁSICA

Brillantes versiones

Desde hace más de un año, la Comunidad de Madrid, a través de su Consejería de Educación y Cultura, anda metida en un estupendo empeño: la cuarta orquesta sinfónica de la villa y su región. Se trata, en palabras de Aurora Ruiz González, directora general de Educación, de "aportar un recurso de calidad para el fomento de nuevos valores musicales y para la iniciación profesional de nuestros jóvenes intérpretes".Por tanto, esta cuarta sinfónica madrileña -junto a la nacional, la de RT`VE y la sinfónica de Arbós- posee características diferentes que la acercan al modelo de la JONDE. Lo cierto es q...

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Desde hace más de un año, la Comunidad de Madrid, a través de su Consejería de Educación y Cultura, anda metida en un estupendo empeño: la cuarta orquesta sinfónica de la villa y su región. Se trata, en palabras de Aurora Ruiz González, directora general de Educación, de "aportar un recurso de calidad para el fomento de nuevos valores musicales y para la iniciación profesional de nuestros jóvenes intérpretes".Por tanto, esta cuarta sinfónica madrileña -junto a la nacional, la de RT`VE y la sinfónica de Arbós- posee características diferentes que la acercan al modelo de la JONDE. Lo cierto es que tanto en la joven orquesta, que dirige Colomer, como en ésta, que guían Mancini y Sempere, se dan dos circunstancias específicas: los atriles están cubiertos en su totalidad por instrumentistas españoles jóvenes y su trabajo redundará en la, por el momento, problemática continuidad de las formaciones estables.

Comunidad de Madrid

Orquesta Sinfónica de Estudiantes.Director: G. Mancini. Solistas: Rocío León y Nuria Félix, violinistas. Obras de Bach, Debussy, Sibelius, Humperdinck, Fauré y Falla. Auditorio Nacional. Madrid, 18 de mayo.

En estas actuaciones, organizadas dentro de las fiestas de San Isidro, suena por dos veces la Orquesta Sinfónica de Estudiantes, que acoge en su seno más de 90 intérpretes procedentes del Real Conservatorio Superior de Música y de seis escuelas y conservatorios profesionales de Madrid, Alcorcón, Alcalá de Henares, Getafe y San Lorenzo de El Escorial.

Éxito claro

Empecemos con una afirmación rotunda: a la vista de lo escuchado en el Auditorio Nacional, la viabilidad y el éxito de la empresa me parecen claros. No sé si el maestro romano Giuseppe Mancini, nacido en 1952 y vecino de Madrid desde 1990, posee cualidades homologables a las de Edmon Colomer, pues es pronto para emitir opiniones definitivas, pero los jóvenes músicos consiguieron versiones brillantísimas de páginas de distinta dificultad y vario carácter, desde el Concierto en re menor para dos violines de Bach, con muy estimables intervenciones solistas de Rocío León y Nuria Félix, hasta El sombrero de tres picos, de Falla, pasando por la sutileza de dos obras francesas: La petite suite (orquestada por Henri Busser) y Pelléas et Melisande, de Gabriel Fauré. Entre ellas, la obertura de Hänsel und Gretel (Juanito y Margarita), de Humperdinck, y la lírica y estentórea Finlandia, de Sibelius. Un clima juvenil y entusiasta rodeó el trabajo de la nueva formación, que en junio se presentará nada menos que en la Philarmonie de Berlín.

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