Ocho votos contra la partitocracia

Los resultados de los otros siete referendos celebrados junto con el de la reforma de la ley para la elección del Senado confirman plenamente que el voto global emitido ayer por los italianos fue contra la corrupción, contra los favoritismos y, en definitiva, contra la llamada partitocracia. Las últimas proyecciones de los resultados reflejan, en un voto contra el desmesurado poder económico y social que los partidos políticos habían adquirido al amparo de un sistema caracterizado por un populismo de raíces democristianas.Prueba de ello es que la consulta que concentró el mayor número de votos...

Los resultados de los otros siete referendos celebrados junto con el de la reforma de la ley para la elección del Senado confirman plenamente que el voto global emitido ayer por los italianos fue contra la corrupción, contra los favoritismos y, en definitiva, contra la llamada partitocracia. Las últimas proyecciones de los resultados reflejan, en un voto contra el desmesurado poder económico y social que los partidos políticos habían adquirido al amparo de un sistema caracterizado por un populismo de raíces democristianas.Prueba de ello es que la consulta que concentró el mayor número de votos afirmativos, con un 90,10% de los sufragios, establece la abolición de la financiación estatal de los partidos, pero no de las responsabilidades penales adquiridas a tenor de la ley ahora derogada sobre el mismo tema, central en todos los escándalos.

Como polo opuesto, destaca que la despenalización de la tenencia de droga para el consumo personal, un tema más próximo a la esfera de lo privado, ha sido aprobada con un margen estrechamente favorable del 55% de los votos. Este resultado era de esperar, dado que entre los que apoyaban el sí no estaban grandes partidos como la Democracia Cristiana o la Liga del Norte y que el tema es, en sí mismo, socialmente conflictivo.

Pero otros datos confirman el sentido político básico del voto italiano. Así, el segundo referéndum más votado, tras el de la financiación de los partidos, fue precisamente el que proponía la abolición del Ministerio de las Participaciones Estatales, que tuvo un 90% de apoyos, siempre según datos provisionales. Este voto parece ir directamente en contra de la desmesura adquirida por el sector público, que es el otro pilar básico de la degeneración del sistema.

La tercera consulta más votada fue la que priva al Gobierno, y por tanto a los partidos, de la facultad de nombrar a los presidentes y vicepresidentes de las Cajas de Ahorro. El 89,4% de los electores se declaró favorable a este cambio, lo que es tanto como decir que casi todos los italianos han exigido que termine el reparto de poltronas y, en general, una política basada en el intercambio de apoyos y favores.

El referéndum por la supresión del Ministerio de Turismo y Espectáculos obtuvo un 81,5 de apoyos, que son normalmente interpretados como expresión de una voluntad de reforzar las competencias de las regiones frente al Gobierno. Cierran la serie el referéndum para la supresión del Ministerio de Agricultura, que deja en suspenso la representación internacional de Italia sobre estos temas, con un 69.9%, y el de la droga, con el 55% de síes mencionado.