Crítica:POP

Recuperación

Duran Duran, la banda encabezada por Simon Le Bon que a principios de los ochenta comenzó con una música marcada por la estética de sus componentes, vuelve ahora con un nuevo trabajo titulado con el nombre del grupo. Tres años sin grabar nada han dado paso a un trabajo concebido con las nuevas claves de la música de baile del momento combinadas, en diferentes dosis, con el sonido funk-techno, con el que se arroparon durante sus años en alza.En la sala Diemahuer presentaron este último trabajo, dominado por las influencias de gente como Prince, música para bailar y baladas con forma de h...

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Duran Duran, la banda encabezada por Simon Le Bon que a principios de los ochenta comenzó con una música marcada por la estética de sus componentes, vuelve ahora con un nuevo trabajo titulado con el nombre del grupo. Tres años sin grabar nada han dado paso a un trabajo concebido con las nuevas claves de la música de baile del momento combinadas, en diferentes dosis, con el sonido funk-techno, con el que se arroparon durante sus años en alza.En la sala Diemahuer presentaron este último trabajo, dominado por las influencias de gente como Prince, música para bailar y baladas con forma de himno, manteniendo una nueva imagen romántica, clave definitoria del grupo británico.

Dos violines y un violonchelo, una voz para el coro y un sonido completo, complejo y redondo dominaron un concierto rico en calidad y monótono en temática. La repetición de fórmulas en Duran Duran mina la capacidad como instrumentistas de los componentes de la banda, que mostraron una versatilidad incapaz de superar la impersonalidad de muchos de los nuevos temas. Simon Le Bon tiene una voz resultona y capaz, que, sin embargo, siempre parece quedarse a medio camino, especialmente cuando el coro hace su aparición, anulando con su potencia cualquier atisbo de otras voces.

Duran Duran

Simon Le Bon (voz), Nick Rhodes (teclado), John Taylor (bajo), Warren Cuccurullo (guitarra), Fergus Gerrard (batería), Lamya al Mugheiry (coros), Yousa Phale (cuerda) y Ellen Blair (cuerda). Sala Diemahuer. Jueves, 11 de marzo. Diez de la noche. Entradas: 3.000 pesetas.

Los primeros minutos del concierto estuvieron dedicados a temas emblemáticos de la banda; temas a los que los nuevos arreglos preparados para la ocasión hacían bastante irreconocible su origen. Pero el grueso del concierto se basó en el riesgo de presentar los nuevos temas de su trabajo, que, en definitiva, aportaron un sonido potente y efectivo sin añadir ninguna novedad a su carrera.

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