El déficit oculto de la Generalitat superó los 200,000 millones de pesetas en 1990

El Gobierno de la Generalitat continúa su tendencia a acumular un déficit presupuestarlo anual para el que no existen propuestas de financiación, según los datos del último informe de fiscalización entregado al Parlamento catalán por la Sindicatura de Cuentas. Este informe, correspondiente a 1990, indica que el déficit presupuestario acumulado ascendía al término de aquel ejercicio a 206.364 millones de pesetas.

El presupuesto inicial de 1990 aprobado por el Parlament ascendía a 987.971 millones de pesetas, pero al acabar el año había experimentado una desviación al alza de 133.007 mill...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El Gobierno de la Generalitat continúa su tendencia a acumular un déficit presupuestarlo anual para el que no existen propuestas de financiación, según los datos del último informe de fiscalización entregado al Parlamento catalán por la Sindicatura de Cuentas. Este informe, correspondiente a 1990, indica que el déficit presupuestario acumulado ascendía al término de aquel ejercicio a 206.364 millones de pesetas.

El presupuesto inicial de 1990 aprobado por el Parlament ascendía a 987.971 millones de pesetas, pero al acabar el año había experimentado una desviación al alza de 133.007 millones. El déficit fue de 6.112 millones en el presupuesto de la Administración de la Generalitat y de 18.826 millones en el de la Seguridad Social en Cataluña, que comprende el Instituto Catalán de la Salud (ICS) y el Instituto Catalán de Asistencia Social (ICAS).La deuda de la Generalitat se elevaba a 188.737 millones al término de 1990, un nivel de endeudamiento habitual en los últimos años. Los avales a empresas que resultaron impagados en 1990 ascendieron a 3.078 millones de pesetas.

El informe de la Sindicatura contiene también la fiscalización de las cuentas de la Seguridad Social, de las entidades autónomas y las empresas públicas catalanas. Entre estos últimos destacan los relativos a la Entidad Autónoma de Juegos y Apuestas (EAJA), que gestiona las loterías de la Generalitat, y los de la Corporación Catalana de Radio y Televisión (CCRTV).

La cuenta de explotación de EAJA en 1990 muestra una pérdida de 311 millones de pesetas, pese a haber recibido una subvención de 629 millones. Es un resultado especialmente significativo porque EAJA fue creada para dotar al Gobierno catalán de una vía adicional de financiación.

Para defenderse de las protestas que provocó la creación de estas loterías, el Gobierno aseguró que los ingresos serían destinados al Departamento de Bienestar Social. Pero la concesión de las loterías provocó uno de los mayores escándalos de la etapa Pujol y su gestión no ha servido para dotar a la Generalitat de nuevos ingresos.

Las pérdidas de la radio y televisión institucionales, la CCRTV, alcanzaron en 1990 los 489 millones de pesetas.

Archivado En