CRISIS EN LOS MERCADOS DE CAMBIOS

Las eléctricas piden que suba la tarifa para compensar el aumento de su deuda

Las compañías eléctricas quieren que el impacto causado por la devaluación de la peseta en su deuda -aumento de 98.000 millones de pesetas que se reflejarán como pérdidas (véase EL PAÍS del 19 de septiembre)- se transmita directamente a las tarifas que paga el usuario. Para ello se escudan en la orden ministerial de 19 de diciembre de 1988 sobre corrección de desviaciones en la fijación de tarifas.

Según fuentes del sector, la devaluación se considera una desviación "como puede ocurrir con la inflación", contemplada dentro del capítulo titulado tasa de retribución del periodo,...

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Las compañías eléctricas quieren que el impacto causado por la devaluación de la peseta en su deuda -aumento de 98.000 millones de pesetas que se reflejarán como pérdidas (véase EL PAÍS del 19 de septiembre)- se transmita directamente a las tarifas que paga el usuario. Para ello se escudan en la orden ministerial de 19 de diciembre de 1988 sobre corrección de desviaciones en la fijación de tarifas.

Según fuentes del sector, la devaluación se considera una desviación "como puede ocurrir con la inflación", contemplada dentro del capítulo titulado tasa de retribución del periodo, que se refiere a los costes financieros en los que se desenvuelve el sector (tipo de interés al mibor y de las monedas en las que están endeudadas las eléctricas).

En caso de que sea aceptada la petición de las eléctricas, el coste en su cuenta de resultados sería cero, mientras que la tarifa de 1993 sufriría un aumento adicional de más de dos puntos porcentuales, según las fuentes consultadas.

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